Progreso de los 'verdes' y de la extrema derecha en las elecciones legislativas celebradas en Suiza

En un clima de absoluta normalidad, pero sin demasiado entusiasmo, aproximadamente el 45% del electorado suizo (cuatro millones de inscritos) se ha desplazado este fin de semana a las urnas para elegir un nuevo Consejo Nacional (200 diputados) y 46 senadores, que constituyen la cámara alta o Consejo de los Estados.Las primeras estimaciones dejan ver un aumento creciente del abstencionismo. Este retroceso de la participación ciudadana se confirma periódicamente desde hace algo más de una década y curiosamente en Suiza nadie se rasga por eso las vestiduras, incluso al comprobar que una minoría decide las orientaciones políticas del país.

Desde hace un cuarto de siglo, la paz social y el consenso constituyen la base de entendimiento de la alianza gubernamental, integrada por cuatro partidos (socialistas, radicales, demócratacristianos y centristas) que en la última legislatura contaban con 169 de los 200 escaños del Parlamento y con 43 de los 46 del Senado. En esta ocasión, las organizaciones progresistas, los independientes, el partido de los verdes y la extrema derecha (Acción Nacional) han progresado ligeramente en sufragios. El partido comunista, en cambio, ha perdido votos así como la alianza gubernamental en su conjunto, y el partido socialista en particular.

Oscilaciones mínimas

Sin embargo, los resultados de las elecciones no alteran el panorama político. Sólo el legislativo -y como es ya habitual también el Gobierno- podrían modificar los reflejos de su comportamiento en función de "las nuevas sensibilidades" y el respaldo que hayan obtenido los 37 partidos que presentaban listas en estos comicios. Las oscilaciones del electorado suelen ser mínimas, como lo prueban los resultados de las dos últimas elecciones.En 1975 el partido socialista (PS) conseguía 55 diputados y cinco senadores; los radicales (PR) 47 y 15, respectivamente; los demócratacristianos (PDC) lograban 46 escaños en el Parlamento y 17 en el Senado y los centristas (UDC) 21 y 5, respectivamente.

En 1979, con el 80% de sufragios, la Alianza Gubernamental repartía así los escaños: PS, 51 diputados y nueve senadores; PR, 51 y 11; PDC, 44 y 18; y UDC, 23 y 5

Las variaciones serán mínimas en 1983, según las estimaciones de los observadores políticos que cuentan ya con los primeros resultados. De ellos se deriva un retroceso de la izquierda cuyo exponente máximo es el partido del trabajo (comunistas) y un aumento de las fuerzas nacionalistas, los independientes y los ecologistas.