El Gobiemo negociación las autonomías la rentabilidad de las líneas de Renfe

El Gobierno negociará acuerdos con las comunidades autónomas y ayuntamientos para rentabilizar las nuevas líneas y servicios de éstos y los de las líneas explotadas por Renfe, según un estudio del Ministerio de Transportes, Turismo y Comunicaciones (MOPU).El documento, hecho público ayer en Ginebra y presentado simultáneamente en Nueva Delhi, donde tiene lugar la asamblea general de IATA, hace particular hincapié en las dificultades monetarias de las distintas compañías, los problemas de tesorería y los impedimentos de muy diversa índole que dificultan la transferencia de divisas.

Un documento similar, elaborado también por el ministerio, ha sido estudiado para la elaboración de un contrato-programa para los Ferrocarriles de Vía Estrecha (Feve).

En las líneas del contrato-programa de Renfe se destaca que su objetivo fundamental es conseguir la ejecución de la política ferroviaria del Gobierno y el equilibrio paulatino de la cuenta de explotación de Renfe sin otras aportaciones del Estado que las deducibles de obligaciones de servicio público impuestas por el mismo.

Reducir los accidentes

El Ministerio de Transportes, Turismo y Comunicaciones considera que los sindicatos deben participar en el acuerdo, que contemplará el equilibrio de la plantilla y revisará la política de personal, con atención prioritaria a la formación del mismo.Entre las medidas a tomar para rentabilizar los servicios figuran: incremento de la velocidad comercial de los trenes diurnos de viajeros de largo recorrido hasta los límites permitidos, incremento de los servicios diurnos interurbanos, potenciación de servicios de cercanías y aumento de la regularidad.

En cuanto a los trenes de mercancías, señala la necesidad de reducir los plazos de transporte del vagón completo a niveles comparables con los de carretera y la garantía del cumplimiento de plazos, entre otras.

Se plantea como uno de sus objetivos la reducción de los índices de accidentes a los promedios de la redes ferroviarias de Europa occidental. En cuanto a política de tarifas, se plantea la necesidad de subir las tarifas de mercancías lo conveniente para cubrir el total de gastos.

En los trenes de viajeros se considera necesario incrementar los servicios de camas y trenes diurnos de alta calidad en primera y segunda clase. En los otros trenes que no son de cercanías, subir lo necesario para cubrir al menos el 50% de los gastos originados por este tráfico, con crecimiento limitado por el índice de precios al consumo (IPC).

En cuanto a tarifas de cercanías, se prevén las tarifas actuales, sin bonificación, limitadas en su evolución por el IPC. Respecto a las inversiones, se considera que hay que hacer las necesarias para la reposición y mantenimiento del activo, inversión nueva de incremento de calidad-capacidad e inversión nueva de racionalización-reducción de costes.