Algunos aparatos llegaron a España con corrosiones
Algunos aviones Mirage F-1, los más modernos de que disponen las fuerzas aéreas españolas, llegaron a España con corrosiones en algunas partes importantes de los aparatos, concretamente en la tobera de salida de gases del motor, según aseguraron a este periódico altos mandos del Ejército del Aire. España compró 72 aparatos de este tipo a Francia, y las últimas unidades llegaron a finales de junio del pasado año.
Los defectos encontrados en algunos aparatos fueron comunicados en su día de forma airada a la firma constructora de los aviones, Dassaul-Breget, pero las autoridades francesas solicitaron a las españolas que no dieran ninguna publicidad al hecho. Los mandos militares accedieron a esta petición, mientras técnicos franceses se desplazaban a España para arreglar las deficiencias.
Los 72 aparatos adquiridos por España se encuadraron en el Mando Aéreo de Combate (MACOM). De esos aviones, 48 tienen sus base en la península y el resto en Canarias. Básicamente, el F-1 está concebido para defensa y ataque aire/aire. Hasta que no se reciban los F-18A americanos recientemente adquiridos constituyen la pieza fundamental en la defensa aérea del territorio nacional. Los aparatos estarán en servicio hasta finales de la década de los 90.
El primer vuelo de un F- 1 se registró el 23 de diciembre de 1966. El aparato tiene un solo motor SNECMA que le permite alcanzar una velocidad máxima de 2,2 mach (2,2 veces la velocidad del sonido). Habitualmente, el F- 1 lleva misiles aire/aire, equipados con sistemas de rayos infrarrojos o con radares.
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