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Morán pide en la ONU un orden internacional más seguro y justo

La insistencia en la necesidad del desarme y de un mundo más justo y más seguro, la celebración de un referéndum sobre la pertenencia de España a la OTAN, la reivindicación territorial sobre Gibraltar y la inquietud de España por la situación en Latinoamérica han sido los ejes de la alocución del ministro español de Asuntos Exteriores ante la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York. Fernando Morán preparó su exposición ante la ONU partiendo de la nueva estructura de la sociedad española y de su sistema democrático.Al margen del discurso ante la asamblea, pronunciado a las doce menos cuarto de la noche (hora peninsular), Morán confirmó su próxima visita a China (del 28 de octubre al 1 de noviembre) y expresó a su homólogo francés, Claude Cheysson, la preocupación de España por el bloqueo francés de las negociaciones para su adhesión a la CEE.

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Morán garantizó en la ONU "el continuo apoyo de España a la causa de la distensión y el desarme", así como, específicamente, a las reuniones de Ginebra entre soviéticos y norteamericanos en busca de un compromiso para una reducción y control de armas nucleares de medio y largo alcance.

El representante español insistió en "la posibilidad de alcanzar un equilibrio a un nivel más limitado de armamentos". España considera urgente volver a "dar primacía a los factores políticos" (alusión a la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación en Europa), y no sólo a los estrictamente militares, en materia de control de armamento.

El "condenable derribo de un avión civil surcoreano por parte de la Unión Soviética" ha demostrado la fragilidad de "esa paz armada" sobre la que se asientan hoy las relaciones internacionales, afirmó el ministro.

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Morán dijo que los españoles se pronunciarán en su día sobre las modalidades de su contribución a la defensa occidental

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En el contexto de los "delicados equilibrios en que se basan muchas veces las relaciones entre los bloques", Morán puntualizó ante la asamblea de la ONU que España "mantiene una postura de firme colaboración en el seno de la Alianza Atlántica (OTAN), a la que España pertenece". Sutilmente, sin citarlo por su nombre de referéndum, Morán aludió a la realización de "un estudio en profundidad sobre las posibles modalidades que puede revestir, nuestra contribución a la defensa occídental, contribución que puede materializarse de muy diversas maneras, y sobre la que se pronunciará en su día el pueblo español".

Pasando de la filosoria general, un tanto ambigua y destinada a intentar contentar a todo el mundo, a temas más concretos, el ministro español destacó ante la asamblea aquellos puntos en que el Gobierno socialista tiene las ideas más claras, aunque esté lejos de poder convertirlas en realidad. Refiriéndose a Gibraltar, Fernando Morán dijo: "En nombre de mi Gobierno quiero expresar, una vez más, nuestra decidida e irrenunciable voluntad de restablecer la integridad territorial de España". Por medios pacíficos, por la vía del diálogo (que Londres se empeña en obstaculizar) y por la aplicación de la declaración de Lisboa en toda su integridad. Las negociaciones con la CEE, "base europea de nuestra acción exterior", diría Morán, "deben recibir el impulso definitivo" para la adhesión de España al Mercado Común.

El Sáhara

Sobre la problemática del norte de África (terreno en el que los medios diplomáticos españoles no han ocultado su satisfacción por el hecho de que el rey Hassan de Marruecos no citara Ceuta y Melilla en su discurso ante la ONU), el Gobierno de Madrid ve "con gran satisfacción el proceso de acercamiento intermagrebí'. A propósito del litigio sobre el territorio del Sáhara occidental, el ministro de Asuntos Exteriores recordó que "el proceso de descolonización no ha terminado". Morán añadió que, el Gobierno español confía en que los saharauis "puedan ejercer, mediante un referéndum y dentro de los plazos y condiciones establecidos por la OUA, su derecho de autodeterminación".

En relación con la República de Guinea Ecuatorial, Morán ratificó "Ia voluntad (española) de apoyo y cooperación en su proyecto de democratización política y de reconstrucción económica", con la única contrapartida para España del respeto de los acuerdos contraídos.

Centroamérica

El ministro español denunció ante el foro mundial "las serias tensiones fronterizas y solapadas agresiones que pretenden internacionalizar" el conflicto centroamericano, introduciéndolo peligrosamente en una dinámica de enfrentamiento Este-Oeste. España repitió su firme apoyo a los esfuerzos de paz del grupo de Contadora.

En el contexto general latinoamericano, Morán recordó que "España sigue con singular atención los importantes avances hacia el restablecimiento de la democracia" en varios países suramericanos, especialmente en Argentina. Aludió al "foco de tensión" que supone el caso de las islas Malvinas y solicitó urgentes negociaciones destinadas al restablecimiento de la "integridad territorial argentina". La invasión de Líbano y la situación en Oriente Próximo fueron citadas por el ministro español de Asuntos Exteriores, que exigió "el respeto de los derechos legítimos de todos los pueblos, incluido el palestino, y la seguridad de todos los Estados de la región, incluído Israel".

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