Agosto cultural

Madrid es un poco la ruina. En agosto, toda. Durante los otros meses nos hemos puesto de acuerdo casi todos en algo: es preciso que pasen cosas y nos estremezcamos de gusto por lo novedoso o lo recientemente envuelto. Primavera, otoño, invierno; exposiciones, música, cine, revistas, visitas de famosos, etcétera.Llega el verano, y todos a la playa. Aviso que trabajo en una galería de arte que tiene la osadía de abrir sus puertas en este maldito mes. Como tengo bastante tiempo para desvariar, le he estado dando vueltas a una idea que luego americanos, ingleses, japoneses... y muchísimos españoles que se acercan por Madrid en agosto me han confirmado. ¿No es posible un agosto cultural, y digo cultural con minúsculas, no de grandes acontecimientos, sino de muchos y variados y divertidos?

En London city, por ejemplo, agosto es un buen mes para ver exposiciones, asistir a conciertos, etcétera. Lo descubrieron hace tiempo. Aquí no. Casi todos los periódicos retiran su sección de galerías de arte, claro que pocas quedan abiertas, pero tampoco es eso. Bastantes extranjeros cuentan únicamente (me lo han dicho) con la gacetilla de galerías de arte que publica EL PAÍS para informarse. Felicidades en su. nombre. Pues esta gente tiene verdadero interés en conocer qué se traen entre manos los artistas españoles. Son muchos los que vienen a Madrid en agosto y muchos los que nos quedamos. Que se piensen los de siempre, que nos pensemos entre todos hacer algo atractivo en años sucesivos, porque si no otros lo pensarán por nosotros. De todos modos, Madrid, en agosto, también es una delicia. /