La política económica del PSOE
En su Tribuna libre del pasado día 23, Arespacochaga incide en una postura que viene siendo sistemática por parte de los parlamentarios del Grupo Popular. En este caso, el planteamiento de que la moderada política económica del PSOE constituye una usurpación ideológica respecto a la derecha lleva al ex alcalde de Madrid a afirmar que la aplicación por parte del PSOE de un programa político distinto al anunciado antes de las elecciones supone "parco bagaje ideológico y excesiva ambición de poder, ambos índices de una deshonestidad política".¡Ya está bien de esta cantilena! Olvida Arespacochaga, o más bien intenta hacer olvidar a la opinión pública, que el masivo triunfo electoral de los socialistas el pasado octubre, mucho más que la aceptación concreta de un programa o incluso de una ideología (es bien difícil que la masa electoral de un país poco culturizado conozca los detalles específicos de los idearios políticos), supone una descalificación en bloque a la deshonestidad de la derecha, un rechazo a la política de pasteleo de UCD y un deseo de que se operase un claro relevo de poder. Es más, en determinados sectores socialistas no sólo no se habrá dado dicha ambición de poder, sino que se habrá tomado el relevo como una pura obligación, en un momento bien difícil que obliga a asumir una herencia, con una economía más que deteriorada.
Si la política es el arte de lo posible dejemos que el Gobierno socialista desarrolle o modifique la suya como pueda, y como crea que resulte conveniente para cada momento dado. Y después de todo, los tres años que quedan par a las próximas elecciones no es tan largo plazo, sobre todo si lo comparamos con los cuarenta y pico que hemos tenido que soportar a la derecha bajo ropajes ligeramente diversos. /
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