La supuesta república de Islamistán
En un reciente editorial de primera página, el militante diario Azadegan, de Teherán, órgano de los guardianes de la revolución de Jomeini (pasdaranes), opinaba que lo dicho en la vista de la causa contra los 13 fundamentalistas islámicos de Sarajevo "es prueba de que Bosnia, habitada por población musulmana, es una república islámica".El diario presenta al imán yugoslavo Hasan Cengic compareciendo ante sus jueces "con el Corán en la mano y afirmando que el Islam es religión, política, economía, ciencia, moral y revolución cultural".
"Los funcionarios yugoslavos tienen que entender que no podrán detener al Islam con cárcel y opresión. Mejor harím en ver los puntos débiles de su marxismo y considerar si sólo la religión musulmana se queja en Yugoslavia".
Hasta la fecha, los acusados han negado en el juicio haberse as ociado con fines sedíciosos para erigir a Bosnia en una república que se llamaría Islamistán.
El diario teheraní lo afirma ahora: "De las declaraciones y puntos de vista de los rilusulmanes detenidos se puede concluir que lo.que éstos quieren es esta'blecer un Gobierno de Jcleología islámica apoyado en leyes islámicas o en la internacionalización".
"Países que en su tiempo, bajo lemas proletarios u obrerístas, quisieron ganar buena fama se asocian ahora al frente antiislámico", dice el editorial refiriéndose a Yugoslavia, Estado clasificado en, un tercer tipo de satanes persecutores de la fe de Alá, los que reprimen la actuación de las organizaciones revolucionarias islárnicas.
En un primer tipo de satanes figurarían los países marionetas de Estados Unidos, como Egipto; o del Reino Unido, como Balirain. Un segundo tipo englobaría a Estados de ideología atea, como la Turquía de Ataturk, que, por miedo a su opinion. pública islámica, tratan de asimilar a los musulmanes o bien los condenarían en secreto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.