Los gastos militares superarán por primera vez, los 500.000 millones de pesetas

Los responsables del Ministerio de Defensa han determinado recientemente las cantidades globales que el próximo año serán distribuidas entre los tres Ejércitos. Los presupuestos definitivos del Ministerio de Defensa para 1984 serán fijados por las Cortes en el otoño próximo, cuando sean debatidos los Presupuestos Generales del Estado. Los correspondientes a Defensa superarán, por primera vez, los 500.000 millones de pesetas, según aseguran fuentes del departamento.La distribución de los presupuestos interejércitos fue decidida tras numerosas consultas a los cuatro miembros de la Junta de Jefes de Estado Mayor (JUJEM). Como en años anteriores, surgieron diferentes puntos de vista entre los altos jefes militares, sobre todo por parte de los jefes de Estado Mayor de la Armada y del Ejército del Aire, quienes entienden que resultan perjudicados en comparación con los fondos destinados al Ejército de Tierra.

Según las fuentes informantes, la principal discusión se centró en la distribución de los fondos previstos en la ley de Dotaciones Presupuestarias para las Fuerzas Armadas, que prevé un reparto interejércitos de 2,2 billones de pesetas entre los años 1982 y 1990. Los fondos previstos en esta ley para el año próximo ascienden a unos 260.000 millones de pesetas. Aunque no ha sido revelada la distribución de estos fondos, la cantidad aproximada que corresponderá al Ejército de Tierra será de unos 115.000 millones, frente a unos 80.000 para la Armada y cerca de 65.000 para el Ejército del Aire.

La mayor parte de estas cantidades será dedicada a créditos para adquirir nuevo material bélico, y una mínima parte (unos 28.000 millones de pesetas) para gastos de la tropa. No obstante,, los gastos totales de personal ascenderán a unos 260.000 millones de pesetas, ya que las cantidades para este capítulo proceden también de otros fondos diferentes a los previstos en la ley de Dotaciones.

La distribución acordada para el año próximo ha sido bien acogida entre los principales jefes de la Armada, pero no así en el Ejército del Aire, donde se insiste en que el resto de países occidentales dedica mayores esfuerzos económicos a las Fuerzas Aéreas.

Respecto a Tierra, a partir del año próximo se tiene previsto iniciar un descenso en el porcentaje de fondos dedicados a este Ejército, en beneficio de los otros dos. Dicho descenso se conseguirá, fundamentalmente, mediante la progresiva reducción de personal. El año próximo, por ejemplo, se pretende tener un Ejército de Tierra con 20.000 hombres menos que en la actualidad.

De acuerdo con las fuentes informantes, el ministro de Defensa, Narcís Serra, no ha logrado realizar para el año próximo su anunciada distribución de los presupuestos por programas, Con este tipo de distribución se pretende conceder prioridad a los programas más necesarios para la defensa nacional. De esta forma, pasaría a un segundo plano la incidencia que, hasta el momento, ha tenido el número de militares que tenía cada Ejército en plantilla a la hora de distribuir los presupuestos. A lo largo de la última década, al Ejército de Tierra le ha correspondido el 55,1% de los presupuestos distribuidos entre los Ejércitos, un 24,5% a la Armada, y el 20,4% al Ejército del Aire. En Italia, por ejemplo, la distribución es la siguiente: 27,4% para el Ejército de Tierra, 26,2% para la Armada y 46,4% para el Ejército del Aire. En Francia, la distribución del presupuesto es ésta: 45,1% para el Ejército de Tierra, 25,2% para la Armada y 29,7% para el Ejército del Aire.