Portugal firmó ayer la carta de intenciones con el FMI para créditos por 400 millones de dólares

Portugal firmó ayer la versión final de la carta de intenciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) según un comunicado oficial hecho público tras la reunión del Consejo de Ministros. La firma del documento conlleva la concesión de un préstamo por valor de 300 millones de dólares y otro por 100 miflones acogido al régimen de facilidades compensatorias. Antes de la firma, el primer ministro, Mario Soares, explicó ayer por la mañana el alcance del acuerdo a dirigentes de los partidos de oposición con representación parlamentaria. El acuerdo conlleva, según dijo el propio Soares, "rigurosas medidas de austeridad", informa Efe.

Por otra parte, según France Press, el FMI terminará hoy el examen de las previsiones para la economía brasileña en 1984. Fuentes no oficiales han señalado que el FMI y el Gobierno brasileflo prevén una tasa de inflación del 150% para 1983 y del 50% en 1984. El déficit del sector público debería reducirse a cero. Al parecer, ha habido acuerdo entre las delegaciones negociadoras sobre los puntos esenciales y se mantienen diferencias en algunos detalles.En cuanto a las condiciones ¡mpuestas al Gobierno de Lisboa, se ha informado oficiosamente que el FMI exige para la economía portuguesa un crecimiento negativo de un punto para 1984. Se pretende conseguir una importante disminución de la demanda intema, a través de reducciones en sus componentes: el consumo público y privado, y las inversiones.

Estabilizar la deuda exterior

Para conseguir estabilizar la deuda extema, cifrada ahora en cerca de 13.500 infflones de dólares, lo que supone un 60% del producto interior bruto (PIB), deberá reducirse el déficit de la balanza de pagos por cuenta corriente, situada a finales del pasado año en 3.300 millones de dólares. Esta reducción tendrá que conseguir un déficit de 2.000 millones para finales de este año, y de 1.500 millones de dólares para finales de 1984.El consumo privado quedará recortado por la disminución del poder adquisitivo de los portugueses mediante subidas salariales inferiores en cuatro o cinco puntos al incremento del índice de los precios al consumo (IPC).

El IPC registrado en el primer semestre del año se situó en torno al 20%, pero medios oficiales consideran que quedará entre el 25% y el 30%. al final de año. El acuerdo Portugal-FMI cristalizará el próximo mes con la firma de una carta de intenciones, por la que el Fondo librará dos créditos por un montante global de 400 inillones de dólares. Uno, de tipo stand by, será de 300 millones de dólares, y el segundo, tiene un montante de 100 millones.