_
_
_
_

La compañía Iberia perdió 23.000 millones de pesetas en los primeros ocho meses de su ejercicio económico

La compañía nacional de líneas aéreas Iberia ha perdido unos 23.000 millones de pesetas en los primeros ocho meses de su ejercicio económico, que terminará el próximo 31 de octubre. Los directivos de la compañía, cuyo accionista único es el Estado a través del Instituto Nacional de Industria (INI), esperan mejorar este resultado durante la temporada alta del verano, aunque en medios responsables del sector industrial se confía muy poco en que se pueda rebajar mucho lo que se considera una cifra astronómica de pérdidas para una sociedad que no está incluida dentro de los sectores considerados en crisis.

Fuentes solventes han señalado a este periódico que la cifra de pérdidas, que triplica las obtenidas durante el pasado ejercicio y que multiplica por ocho las previstas en el Programa Operativo Anual 1982-1983 (POA), elaborado el pasado año, ha causado honda conmoción en las esferas gubernamentales, responsables últimas de la gestión de la empresa, y ha motivado que se cursen instrucciones muy precisas a los responsables directos de la compañía para que procedan a un plan de austeridad en gastos que trate de minimizar el efecto de estas pérdidas.En una reciente reunión del ministro de Industria, Carlos Solchaga, con el presidente del INI, Enrique Moya, y los presidentes de las empresas públicas, celebrada en la sede del instituto, el responsable de Iberia y Aviaco y anterior vicepresidente del INI, Carlos Espinosa de, los Monteros, fue requerido para que la compañía procediese a reducir en un 20% sus gastos generales y en otro 10% los salariales. Espinosa de los Monteros, que un mes antes había enviado al INI y el ministerio su propio plan de actuación orientado a recortar las pérdidas crecientes, sugirió la posibilidad de bajar los salarios y mantener, a cambio, el nivel de empleo. La otra alternativa de reducir plantilla, estimada en 25.000 personas, fue descartada por Espinosa, en principio, como poco social y quizá más costosa.

En medios del INI y del Mínisterio de Industria se tiene la impresión que el plan de Espinosa es aceptable, señalando que no es tan importante el mecanismo de ponerlo en práctica -es decir, reducir salarios o reducir plantilla- en tanto se consigue el objetivo de controlar los crecientes gastos. No obstante, se resalta el hecho de que parece poco presentable, desde el punto de vista de imagen de una empresa pública, proceder a mantener un costosísimo e innecesario nivel de empleo mediante la reducción de salarios en lugar de proceder a un reajuste de la plantilla (se pierde un millón al año por empleado), tal como se va a hacer en otras empresas públicas con elevado e inaceptable volumen de pérdidas.

En términos mas claros, los medios consultados ponen como ejemplo el caso de la siderurgia integral y el sector naval, donde el Gobierno está decidido a acomodar el nivel de plantilla a las necesidades reales de la producción y de la demanda. En fuentes del INI, sin embargo, se matizó a este periódico que no se tiene ninguna preferencia en cuanto a cómo conseguir los objetivos, siempre que éstos se alcancen. A este respecto señalan que no existe ninguna diferencia de criterios entre el presidente del ente público y el de Iberia.

En todo caso, la diferencia de opiniones respecto a lo que hay que hacer se refiere a la readaptación del volumen de la compañía, especialmente en cuanto a la flota de aparatos, es decir, al tamaño ideal que puede tener una compañía de las características de Iberia. En el INI, por ejemplo, se opina que Iberia debería vender o charterizar -es decir, dedicar aparatos a la actividad de charter- entre siete y nueve aviones, fundamentalmente los grandes tipo jumbo, que son los menos rentables en estos momentos. En lberia, por el contrario, se piensa que existe margen de maniobra para utilizar estos aparatos sin necesidad de proceder a su subarrendamiento o transferencia.

Origen de las pérdidas

El origen de las pérdidas acumuladas de Iberia parece descansar en causas ajenas a la empresa, al menos si el fenómeno se contempla con una perspectiva inmediata. No obstante, expertos aeronáuticos consultados opinan que la crisis de Iberia viene de antiguo.

Basta recordar, a este respecto, que aerolíneas como Panam, Braniff o la inglesa British Airways hace años que emprendieron programas severos de reconversión basados en la austeridad, y que hoy ya están dando buenos resultados.

En el lado opuesto hay que citar a TWA, la compañía norteamericana que hoy atraviesa momentos delicados como consecuencia de no anticipar la enorme revolución que se ha producido en el sector y que tarde o temprano hay que afrontar, según los mismos expertos.

En el caso de Iberia, lo que subyace detrás de las astronómicas pérdidas es la crisis latinoamericana de solvencia. Los viajeros procedentes de los países hispanoamericanos, reducida su capacidad de gasto como consecuencia de las continuas devaluaciones de sus monedas en relación con el dólar, apenas viajan a Europa.

Iberia ha sido una de las víctimas del fuerte descenso de esta actividad turística y de negocios en el subcontinente americano, lo que ha provocado que la compañía haya llegado a acumular pérdidas de entre 8.000 y 9.000 millones de pesetas en cada una de sus rutas latinoamericas, concretamente en las previamente más rentables Ciudad de México y Caracas. Pero las pérdidas no se reducen a esta actividad exclusivamente. Por ejemplo, la compañía nacional ha perdido 1.000 millones de pesetas en la explotación de las rutas europeas, algo que algunos escépticos de la capacidad de reacción de los gestores de Iberia califican de "inaceptable".

Ayer se celebró la primera asamblea de trabajadores de Iberia convocada por CC OO a la que asistieron más de 1.000 trabajadores. Durante la asamblea se informó de los planes de reestructuración por parte de los dirigentes del citado sindicato y se analizaron los datos publicados recientemente .

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_