_
_
_
_
_

Arrestado un guardia civil que no reaccionó mientras asesinaban a dos compañeros

El guardia civil Esteban Castro Egozcue, destinado en Pamplona, se encuentra recluido en los calabozos de la 521 Comandancia de esta ciudad desde el pasado día 22, después de que el agente, a pesar de estar en el interior de una garita blindada, no reaccionara durante el atentado que el 28 de mayo costó la vida a dos compañeros suyos de servicio en el edificio de Correos de Pamplona.

Fuentes policiales comentaron ayer a este periódico que el guardia estaba en la garita cuando dos terroristas, vestidos con trajes, penetraron en el edificio de Correos y efectuaron varios disparos contra un cabo y un guardia de servicio, que se encontraban a escasos metros de Esteban Castro. Sin embargo, este guardia no reaccionó para evitar el atentado ni para intentar detener a los terroristas, sino que, una vez producidos los hechos, salió corriendo de la garita y se escondió en una planta superior del edificio.Horas después del atentado, Esteban Castro fue sometido a tratamiento médico, ya que sufrió una fuerte depresión nerviosa. Concluido el tratamiento, el 22 de junio fue interrogado en la comandancia de la Guardia Civil de Pamplona, porque se le había abierto un expediente. Horas después del interrogatorio, el guardia se desplazó en su automóvil hasta la frontera franco-navarra y, posteriormente, regresó a la comandancia, donde, al parecer, comunicó a sus superiores que se había sentido vigilado por varios compañeros. Por su parte, los jefes le contestaron que debía ingresar en los calabozos.

Fuentes de la Dirección General de la Guardia Civil señalaron ayer que la conducta del guardia durante el atentado no fue la propia de un miembro del Cuerpo, por lo que se intentan aclarar las posibles responsabilidades del el agente. No obstante, estas mismas fuentes descartaron cualquier sospecha sobre supuestas connivencias del guardia con los terroristas. Por el contrario, comentaron que, en un atentado, pueden producirse reacciones muy extrañas entre quienes lo presencian, pero que, en este caso, no puede justificarse la actuación del guardia.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_