La salida del túnel del pacifismo español

El movimiento pacifista europeo va a emprender de aquí al otoño la protesta mas sonora de su historia. No sólo contra los euromisiles, sino contra los SS-20 soviéticos que apuntan directamente hacia los miembros europeos de la Alianza. Son unos meses de euforia y movilización en los que también están volcados los grupos españoles.

Las primeras pancartas de la manifestación lo decían todo. Lo explicaban los pasquines, se leía en las pegatinas, se veía en las caras de la gente. Eran invitaciones a vivir. Sin pagar ningún precio por ello. Iban primero los movimientos por la paz seguidos de los grupos ecologistas, los comités Anti-Otan, las Asociaciones de Vecinos, los sindicatos, las Juventudes Socialistas, las Juventudes Comunistas, el PCE.Más atrás, una charanga intercalada entre militantes del Movimiento Comunista (MC) y ya, al final, casi como un apéndice postizo, una ensalada ondulante de banderas rojas cubierta por los exiguos militantes de partidos y grupúsculos de ultraizquierda. Estos últimos, a pesar de sus consignas anti-Otan, éran los únicos que daban a la manifestación cierto abuso de tonos rojos de película truculenta o de Primero de Mayo en Moscú.

Ese domingo 12 de junio,en el Paraninfo de la Ciudad Universitaria de Madrid estaban niños, mujeres y hombres clamando por la paz, el desarme y la libertad, como en la manifestación de¡ pasado 15 de noviembre, celebrada con todo el apoyo propagandístico y económico del PSOE, en la que los manifestantes rondaron el medio millón. El mismo Guillermo Galeote, que descalificó a la manifestación del 12 de junio -aunque luego hubiera de retractarse- se encargó en la edición anterior de conectar con estos grupos que ahora denunciaba como controlados por el Pacto de Varsovia. Y es que mientras el movimiento pacifista europeo goza de un vigor apabullante, en España todo acaba de comenzar. Aunque ya se perfilan sobre el papel alrededor de sesenta asociaciones, la mitad de ellas nacidas después de la manifestación del 15 de noviembre de 1982.

Parte del movimiento pacifista ha nacido en torno a los Comités Anti-Otan, aunque en sus comienzos, a finales de 1980, la conciencia pacifista de muchos de sus miembros era menguada y sólo había un rechazo a la entrada de España en la OTAN. La presencia inicial de algunos destacados prosoviéticos contribuyó a crear esa imagen. Pero lo Comités Anti-Otan han ido recogiendo propuestas más amplias y más europeas: "Disolución de los dos bloques, desarme unilateral, no a los gastos militares y solidaridad con lalucha antiimperialista". Este último punto "incluye tanto el imperialismo norteamericano como el soviético" se apresuran a puntualizar María Gascón Fernando Salas y Carlos Otamendi, miembros de la Comisión Anti-Otan de Madrid. Dentro de los Comités Anti-Otan hay independientes, exiniembros del PCE y del PTE, ecologistas y un importante número de militantes del MC y de la LCR, "pero a título personal".

Pero en España hay otra vía de penetración del pacifismo a través de foros intemaciones o de instituciones como la Bertrand Russell y el END (European Nuclear Disarmament). Dentro de esa corriente europea nació la primavera pasada el Movimiento por la Paz, el Desarme y la Libertad, promovido por algunos militantes del PSOE e intelectuales independientes. En su origen, el Movimiento parecía coincidir con el pacifismo que el mismo PSOE había impulsado en la concentración del 15 de noviembre y que más tarde enfatizó en su campaña electoral. "Pero la presencia del MPDL en la manifestación del 12 de junio -que aunque no era contra el Gobierno, no fue apoyada por el PSOE-, demuestra nuestra independencia,"asegura Enrique Gomáriz a la vez que se apresura a señalar que en estos momentos el Movimiento no recibe ayuda económica del partido socialista ni de la Fundación Pablo Iglesias.

En la línea de los socialdemócratas europeos, el MDLP defiende el desarme multilateral, pide el referendum sobre la OTAN con campaña en contra del propio partido del Gobierno y se une así a las presiones que las Juventudes Socialistas y la propia UGT están realizando sobre el partido en el poder. Pero esa esquizofrenía política que padece el PSOE en torno al tema OTAN coloca en una delicada situación a los miembros del MPDL que a la vez son militantes socialistas, porque "perder la batalla dentro del PSOE es perder la batalla de la OTAN".

Otras quince organizaciones madrileñas, además del MPDL forman desde hace varios meses el CAPD (Comité de Acción por la Paz y el Desarme), en un afán de aunar fuerzas y de romper el cárácter de grupos de iniciados que tiene todavía en España el movimiento pacifista. Entre ellos, Mujeres por la Paz, Movimiento de Objetores, AEPDEN (Asociación de Estudio y Protección de la Naturaleza) y FAT (Federación de Amigos de la Tierra) -aunque objetores y ecologistas, tradicionalmente activos, también suelen estar presentes en los Comités Anti-Otan-, Amigos del Arca, Cristianos por la Paz y la, Asociación por la Paz y el Desarme. Un portavoz de estos grupos aseguró que la financiación de la manifestación "estaba cifrada en un millón setecientas mil pesetas, mientras que la que organizó el PSOE en noviembre de 1981 ascendió a 25 millones". Según dicho portavoz, los, gastos fueron sufragados entre todas las organ;taciones convocantes. Las cantidades más altas las aportaron partidos, sindicatos y asociaciones de Vecinos (300.000 pesetas la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos; 200.000 pesetas el PCE; la misma cifra Comisiones Obreras; 100.000 pesetas las JJ SS y las JJ CC., así como el resto de los partidos; 170.000 los del CAPP; 50.000 la Comisión Anti-Otan, etcétera). En conjunto, los partidos prosoviéticos contribuyeron con lo mismo que las Asociaciones de Vecinos o el PCE y sus Juventudes juntos, con lo que, en su opinion, no puede hablarse de predominio ideológico. Y mucho menos podría demostrarse que ese dinero procedía de determinadas embajadas, a pesar de la comunión ideológica que UCE y el Movimiento de Recuperación Comunista sienten por la Unión Soviética.

"Aunque es cierto que siempre se ha dicho que la URSSes más agresiva. Y que los pacifistas occidentales son tontos útiles", dice con soma Juan Gutiérrez, elegido representante español en la Convención de Berlín por acuerdo de los 250 españoles que asistieron á la Conferencía."Pero el movimiento europeo apoya a su vez a los pacifistas independientes del Este".

La doble decisión de Felipe González sobre los euromisiles ha sido el más duro palo que han recibido los pacifistas en los últimos meses, "porque ¿con qué fuerza moral vamos a mantener la negati