La Policía Nacional se retirará de Carabanchel antes de que acabe julio

Los retenes de la Policía Nacional que han vuelto al interior de las cárceles Modelo (Barcelona) y Carabanchel (Madrid), por decisión del director general de Instituciones Penitenciarias, Juan José Martínez Zato, se retirarán definitivamente de ambos centros antes de que finalice el mes de julio, según explicó ayer a este periódico el subinspector general del departamento, Manuel Rodríguez.

La policía permanecerá en el interior de las cárceles pero "sin contacto directo con los internos", sólo para facilitar su intervención en caso de incidentes graves como los ocurridos recientemente en las cárceles de Barcelona y Madrid.

Las dotaciones fijas, que en ningún caso sobrepasarán el número de 20 agentes, apoyarán '"psicológicamente" con su presencia la realización de los cacheos intensivos que los funcionarios practicarán repetidamente durante las próximas semanas. Estas inspecciones coincidirán con el inicio de la vigilancia policial en los recintos exteriores para evitar el lanzamiento de droga y objetos punzantes desde la calle a los patios de los centros penitenciarios. Con esta doble acción se espera acabar con la posesión de armas caseras por parte de algunos reclusos.

En cuanto se considere que han desaparecido las armas de las cárceles, pero siempre antes de final de julio, la Policía Nacional abandonará definitivamente la Modelo y Carabanchel. El subinspector general afirmó que "en ningún caso puede considerarse que la presencia do la policía en las cárceles tendrá el mismo sentido que tenía antes de su retirada en 1980".