Las Brigadas Rojas abren su 'campaña electoral' con un atentado contra un catedrático socialista

Los más puntuales en abrir siempre una campaña electoral en Italia son las Brigadas Rojas. También en esta ocasión. Así se interpretó el atentado que perpetraron el martes pasado en pleno centro de Roma contra el exponente socialista Gino Giugni, catedrático de Derecho del Trabajo y considerado como el padre del Estatuto de los Trabajadores.

Un grupo de siete componentes de las Brigadas Rojas, que reivindicaron el atentado, intentaron matarle a tiros, disparándole desde una moto. Se ha salvado sólo porque, al parecer, la terrorista que descargó sobre él las siete balas no era muy experta: "Temblaba más que yo", ha comentado el propio Giugni. Al parecer, la policía ya ha identificado a la terrorista. Se trata de una joven universitaria que pertence al nuevo grupo joven de la columna romana de las Brigadas Rojas.Los brigadistas sabían que las elecciones eran seguras. De hecho, el Consejo de Ministros ha indicado ayer la fecha oficial: el 26 y el 27 de junio, junto con las elecciones administrativas parciales. La víctima del atentado, herido por las balas, ha comentado en el hospital: "Este atentado abre la campaña electoral". De diverso parecer es, sin embargo, el presidente de la República, Sandro Pertíni, que ha definido este nuevo acto terrorista como "el último coletazo de la bestia herida de muerte".

Por su parte, los observadores políticos piensan que existe en este momento una maniobra para rehacer, sobre todo en Roma, donde el tejido social es más vulnerable y disgregado, una columna brigadista. Y vuelven a poner el punto de mira en dos objetivos: las cárceles y las fábricas. De hecho, en este mismo momento en la cárcel de Ascolí hay 70 detenidos haciendo una huelga de hambre, siguiendo las consignas terroristas. El atentado contra el hombre que fue el cerebro del Estatuto de los Trabajadores demuestra que los nuevos terroristas intentan aprovechar el desasosiego existente en el mundo obrero italiano por haber sido retocada la famosa escala móvil, es decir, el mecanismo que aumenta cada tres meses el sueldo de los trabajadores según el incremento del coste de la vida.

La reivindicación

En la reivindicación del atentado, las Brigadas Rojas afirman que han intentado matar a Giugni, a quien acusan de ser un "hombre de todas las fases políticas". Lo dicen porque había sido el mayor artífice del Estatuto de los Trabajadores y recientemente había sido también, afirma el comunicado, "el cerebro técnico-político del acuerdo sobre la escala móvil que supone el ataque más grave al Estatuto de los Trabajadores".Habrá que esperar, sin embargo, para saber si se están volviendo a reorganizar las Brigadas Rojas con nuevos militantes o bien si se trata de una desesperada lucha por la supervivencia.