Juan Fernández logró el primer triunfo español

ENVIADO ESPECIAL, La primera etapa en línea de la Vuelta tuvo color español con la victoria de Juan Fernández (Zor), que supo aprovechar perfectamente el tramo final de algo más de un kilómetro de empinada cuesta a través de empedrado, que conducía hasta la plaza Mayor de Cuenca. El francés Dominique Gaigne (Renault), del equipo de Hinault, estuvo muy arropado por todo su equipo y pudo conservar su sorprendente liderato. Hinault ya se dejó ver con su cuarto puesto, pero no así el italiano Giusseppe Saronni (Tongo), que no parece estar decidido a lanzarse a fondo en esta Vuelta, y prefiere rodarse para el Giro.

Apenas tuvo historia esta primera etapa salvo en ese tramo final, durísimo, que conocía a la perfección Juan Fernández. El español supo pegarse inicialmente a los hombres del Renault francés, que intentaron controlar la carrera en estos tramos finales, y se situó luego tras la rueda de Van Calster, para machacarle en los últimos 50 metros. La batalla se había planteado a partir de los últimos 8 kilómetros, donde ya comenzaba cierta dificultad, aunque mínima, en un trazado que hoy, en la segunda etapa más larga de la vuelta -235 kilómetros entre Almusafes y Cuenca- ha ido a través de carreteras en buen estado.Dos cotas montañosas

Sólo dos pequeñas cotas montañosas, benévolamente situadas por la organización como de tercera categoría, el alto de Buñol, en el kilómetro 60, y el de Tórdiga, en el 216. Por el primero se impuso el actual campeón de España, José Luis Laguía (Reynolds), que comenzó así a dar muestras de su decisión de ir nuevamente por el Gran Premio de la Montaña. Tras él cruzó Yáñez (Teka) y el italiano Aliverti (Alfa Lun). Este último se impuso en el segundo puerto, por delante del propio Laguía, que pasó ya a ocupar la general (le la montaña, o más bien de momento de la montañita.

Un Laguía que también contaba en el pronóstico a la hora de esas rampas finales hacia la meta de Cuenca, pero que según confesó a este periódico, "no quise lanzarme cuando se cortó el grupo porque delante estaba mi compañero Gorospe, y no era cosa de tirar porque seguramente contará entre los que intenten también una buena clasificación".

Lluvia en la salida

La lluvia despidió la vuelta en Almusafes a la salida de esta primera etapa, que comenzó con retraso. La avalancha de aficionados y curiosos es grande ante la presencia no sólo de los ciclistas sino de esa especie de circo montado alrededor de la Vuelta con fines publicitarios. Aglomeración que se convirtió en auténtico agolpamiento en la llegada de Cuenca. Las previsiones en este sentido han desbordado por completo las buenas perspectivas que ya tenían los organizadores, con los consabidos problemas para los informa dores. El presumible duelo Hinault-Saronni no se va a producir. Ayer, el corredor italiano no se inmutó cuando se dio el tirón definitivo.

Es más, no intentó recuperar el tiempo perdido. Al final de la eta pa confesó que no se encuentra en su mejor forma. "La Vuelta ha comenzado mal para mí y yo debo pensar en el Giro. Yo estaba mal colocado cuando se dio el tirón, y no tenía nada que hacer para alcanzar al grupo. Hinault está ya muy fuerte y además bien rodeado", declaró Saronni.

El líder, ese joven neoprofesional de 21 años, Dominique Gaigne, supo mantener su sorprendente puesto de privilegio, entrando en el grupo de cabeza, a nueve segundos de Juan Fernández. El francés afirmó a este periódico su sorpresa con la sanción de 13.500 pesetas que se le impuso en la etapa prólogo por no acudir a recoger su galardón como líder y ganador de dicho prólogo, en Almusafes.

"Es que", nos dijo, "me marché al hotel enseguida porque no creía que iba a ganar". Sus compatriotas, tampoco, pero de momento ahí está, dispuesto "a mantener el liderato siempre que pueda lucha por ello". Respecto al ganador manifestó su satisfacción por esté éxito inicial y confirmó que se conocía casi al dedillo el kilómetro final.

La etapa de hoy, segunda de la Vuelta, será Cuenca-Teruel, de 152 kilómetros, prácticamente llana, con la única dificultad del Alto de Rocho, en el kilómetro 22.