Las inversiones extranjeras superaron en 1982 los 182.842 millones de pesetas
La inversión directa extranjera autorizada en España en 1982 totalizó 182.842 millones de pesetas, lo que supuso un incremento del 132% en relación a 1981, cuando la cifra de inversiones autorizadas procedentes del exterior fue de 78.604 millones de pesetas, según datos facilitados por fuentes del Servicio de Inversiones Extranjeras en España, dependiente del Ministerio de Economía.
Durante los primeros meses de 1982 se presentaron ante las autoridades económicas españolas muchas más solicitudes de inversión que en años anteriores, informaron las citadas fuentes, según las cuales, el número de solicitudes se transformó en una verdadera avalancha al convocarse las elecciones legislativas. El temor a que se aplicasen criterios más restrictivos en el futuro y a que se produjera una parálisis de la Administración son los factores que más influyeron en esta acumulación de solicitudes, que en muchos casos se adelantaban a conseguir el visto bueno de operaciones programadas para mucho más adelante.En la distribución por países de las inversiones autorizadas, EE UU ocupó el primer puesto, con un 23,10% del total (14,09% en 1981); Suiza se situó en segundo lugar, con un 19,35% (12,34% en 1981), seguida en tercer lugar por la inversión autorizada a las empresas españolas con participación mayoritaria de capital extranjero, que supuso un 11,14% del total.
En cuarto lugar se situó la República Federal de Alemania, con un 10,32% de participación en el total (9,75% en 1981). Según estos datos, actualmente, en proceso de elaboración definitiva, el origen por países de las principales inversiones directas autorizadas en 1982 se mantiene con ligeras variaciones en la importancia relativa de los mismos. Así, el Reino Unido, que en 1981 ocupaba el primer lugar en la lista de inversiones extranjeras autorizadas, con un porcentaje de 22,4, ha pasado a tener una contribución del 5,63, lo que la sitúa fuera de los cinco primeros puestos, por debajo de Holanda, cuya participación fue de 8,9% de la inversión total autorizada. Francia disminuyó también su participación relativa y pasó a un 4,35% del total de inversión autorizada, tras haber tenido el 11,15% en 1981.
Aunque tienen un valor indicativo importante, las cifras de inversiones autorizadas son, de hecho, cifras teóricas, puesto que las operaciones de transferencia de capital no tiene que llevarse a cabo necesariamente en el mismo año de su aprobación y, por otra parte, existe un importante número de operaciones que no requieren autorización previa para realizarse.
El saldo neto de la inversión extranjera en España en su globalidad (directas, cartera, inmuebles y otras formas) ascendió a 199.000 millones de pesetas en 1982,lo que supuso un aumento próximo al 18% respecto al año anterior. Contabilizado en dólares, el saldo experimentó un retroceso del 1%, con lo que se rompe la evolución de los últimos años, según datos publicados por Información Comercial Española.
Aumento de la inversión alemana
Una evolución muy positiva experimentó la inversión alemana en España en 1982 con un incremento superior al 300% en relación a 1981, según datos facilitados por la Cámara de Comercio de la República Federal de Alemania en Madrid. La inversión directa de procedencia germano-occidental en la España peninsular fue de 304,4 millones de marcos (más de 17.000 millones de pesetas), mientras en 1981 totalizó 91 millones de marcos (más de 5.000 millones de pesetas).En las islas Canarias, sin embargo, la inversión pasó de 16,3 millones de marcos en 1981 a 8,3 millones en 1982. Estas cifras, procedentes de la Oficina Central de Estadística en Bonn, no aparecen aún desglosadas en los diferentes sectores.
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