Los mercados de cambio franceses, a la espera de las medidas económicas

Los mercados de cambio, ayer, tras el reajuste del Sistema Monetario Europeo (SME), se manifestaron relativamente tranquilos. En París, el dólar se cotizo a 7,22 francos, es decir, veintinueve céntimos más que el viernes último, en plena borrasca especulativa. El marco llegó a tres francos, once céntimos más que el viernes. Estas diferencias, por ahora, se consideran prácticamente normales.La devaluación del franco y el realineamiento general de las paridades del SME para este país se consideran como un balón de oxígeno que, necesariamente, tiene que ser acompañado de una política de rigor extremado. Los sindicatos ya adelantan un no rotundo a las medidas de austeridad. La patronal estima que nada será posible sin reducción de las cargas a las empresas.

Hoy puede hacerse público el nuevo plan de austeridad que las autoridades francesas aplicarán para que el reajuste monetaria, y la devaluación del 2,5% del franco (el 8% respecto al marco, teniendo en cuenta que este último se revalorizó en un 5,5%), le permitan a la economía gala superar sus graves dificultades presentes. El presidente François Mitterrand se dirigirá a la nación esta noche con el fin. de crear un clima de unión nacional que propicie el esfuerzo común necesario.

De antemano, los franceses se manifiestan tal como son: egoístas y corporativistas. Todo el cuerpo social comprende que es necesario apretarse el cinturón, pero, en particular, cada cual apunta al otro como causante de los estropicios, y, consecuentemente, como víctima obligada a pagar los platos rotos. Una tras otra, todas las centrales sindicales, de izquierda o independientes, han anunciado que de ninguna manera aceptarán un plan de austeridad que conlleve la reducción del poder adquisitivo de sus afiliados.

Tercera devaluación

La patronal, Centro Nacional .de la Patronal Francesa (CNPF), por la boca de su presidente, Yvon Gattaz, estima que la devaluación del franco "es la sanción a todas las decisiones económicas que han tomado los socialistas". Como este último, en los medios económicos y financieros se dice que esta tercera devaluación, realizada por los socialistas en sus veintidós meses de gestión, es un balón de oxígeno que recupera lo perdido, pero que no ampara el futuro. Gattaz añade que, en lo sucesivo, todo depende del clima de esfuerzo que sea capaz de crear el presidente de la República con una política "que desgrave sustancialmente a las empresas de las enormes cargas que sufre".

Se espera para las próximas horas el plan que ya parece estructurado por el ministro de Economía, Jaeques Delors, y que, en cualquier caso, desembocará de una u otra manera, en una reducción del consumo de los franceses. Ese nuevo plan de rigor, a pesar de todos los mentís, si no ha sido impuesto por los alemanes, se cree que los franceses lo, propusieron de antemano para evitar la humillación.