"La guerra del Sahara continúa", afirma el Frente Polisario
"La guerra entre la República Arabe Saharaui Democrática (RASD) y Marruecos continúa; la paz se halla lejos, muy lejos". Con estos términos, que son una especie de ducha fría a las esperanzas suscitadas por la entrevista Chadli-Hassan II, el Frente Polisario ha vuelto a reafirmar su convencimiento de que los argelinos no negociarán directamente con Rabat una solución política al conflicto.La declaración distribuida ayer por el frente independentista en Argel condena la falsa interpretación del histórico encuentro entre los dos dirigentes magrebíes, a cargo de "quienes quieren presentarlo como una negociación argelino-marroquí, ya que la RÁSD es la única habilitada para concluir un acuerdo de paz con Marruecos". Según el Polisario, la paz en la ex colonia española sigue dependiendo, obligatoriamente, de la retirada de las tropas marroquíes y el respeto, por parte del reino alauí, de "la soberanía y la integridad territorial de la RASD".
Los saharauis, tras haberse otorgado un plazo de reflexión, han dado su visto bueno a la entrevista del rey Hassan II y el presidente Chadli, situando la misma fuera del contexto de la guerra del Sahara occidental. Esta interpretación no es compartida por los medios informativos de Marruecos y Tunicia, quienes aseguran que el conflicto fue el telón de fondo de la entrevista.
Las declaraciones del Polisario, vienen a unirse al malestar que habría causado en Argel la publicación del comunicado oficial marroquí, con un contenido bastante divergente en cuanto a la interpretación de la entrevista.
Este tira y afloja a propósito de la iniciativa tomada conjuntamente por Chadli y el rey Hassan II no impide que siga apareciendo como el primer e importante paso en una futura reconciliación entre los dos países. Marruecos ha enviado sendos emisarios a Arabia Saudí y Tunicia para explicar el sentido y el contenido de la entrevista, y Argel hizo ayer lo mismo con Mauritania, adonde llegó un consejero personal de Chadli para exponer la versión de este país.
Mauritania, el eslabón débil
Verdadera manzana de la discordia entre Argel y Rabat, el conflicto del Sahara seguirá condicionando las relaciones entre los dos países magrebíes, lo que no significa, ni mucho menos, que la posible solución negociada que haya podido ser discutida por Chadli y Hassan Il deje al Polisario en la estacada.El comunicado del Frente Saharaui refuerza la tesis que cunde en esta capital a propósito de una solución que pueda ser interpretada como un éxito personal de las tres partes concernidas más directamente. Dentro de ese esquema, el eslabón débil se llama Mauritania y es hacia Nuakchot donde convergen las miradas.
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