La detención de Barbie puede provocar venganzas nazis
ENVIADO ESPECIALLa detención del ex jefe nazi de la Gestapo, Klaus Barbie, podría despertar venganzas neonazis en Francia y en otros países extranjeros. Este es el temor que crece, tanto, aquí como en la República Federal de Alemania, tras tenerse noticia de dos atentados contra la compañía Air France en Bruselas. La detención amenaza con sacar a la luz también algunas historias relacionadas con el colaboracionismo durante la ocupación nazi.
Varias personalidades, en Francia, políticas u oficiales, no dudan en encontrar semejanzas entre la situación mundial presente y la que, en 1933, dio a luz al hitlerismo y al fascismo.
Barbie, expulsado hacia Francia, el sábado último, por el Gobierno democrático de Bolivia será cambiado de cárcel a lo largo de esta misma semana. La prisión de Saint Joseph o la de Saint Paul ambas ubicadas en la misma ciu dad, recibirán al carnicero de Lyon.
Desde que llegó a Lyon el pasado sábado, Barbie está detenido en una celda del Fuerte Monduc, en una barriada de la ciudad, sin que nadie, salvo los policías que lo custodiaron lo hayan visto. Esta pieza, de cinco metros cuadrados, es similar a la de los demás presos, y Barbie, de 70 años de edad, está sometido al mismo regimen que sus compañeros de cárcel. Su traslado inmediato se debe a razones de seguridad y, sobre todo, a su cobertura médica, es decir, que el Fuerte de Montluc no reune las condiciones necesarias.
A partir de que, hace 48 horas, Barbie llegó a Lyon, se repite que su proceso abrirá heridas, removerá el barro, y destapará asuntos más o menos ciertos. Se sabe que Barbie posee un archivo de la Resistencia y, en sus escasas declaraciones a la Prensa, ha manifestado, según los historiadores más acreditados, que posee también una gran capacidad para la mentira y la calumnia.
Ayer, el doctor Fréderic Dugoujon, en cuya residencia se celebró la reunión clandestina durante la que fue detenido por Barbie el héroe de la Resistencia, Jean Moulin, interrogó públicamente al ministro del interior, Gaston Defferre, sobre su conversación con Moulin aquella mañana de junio de 1943.
En efecto, el ministro del Interior, el domingo pasado, tras la expulsión de Barbie de Bolivia, declaró que había mantenido una entrevista con el jefe de la Resistencia interior en el mañana del día de su detención.
Moulin le informó de la reunión que se iba a celebrar por la tarde y el hoy ministro le aconsejó que no asitiera a la misma. Anoche, el doctor Dugoujon se preguntó por las razones y motivos que habían inducido a Deferre a invitar a Moulin a no participar en la reunión fatal. El ministro reaccionó para afirmar que el había actuado como "un clandestino auténtico. Le hice partícipe de mis temores sin explicaciones. Era lo normal entre nosotros".
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