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Benegas propone un frente por la paz para aislar a HB

Como alternativa para la eliminación de la violencia en el País Vasco -una vez fracasadas las conversaciones convocadas por Garaikoetxea- el secretario general del PSE-PSOE, José María Benegas, propuso ayer la constitución de un "frente por la paz" cuyo objetivo sería el aislamiento de Herri Batasuna, coalición a la que identificó reiteradamente con ETA Militar. José María Benegas, que calificó de "burla para las esperanzas de paz" el reciente atentado contra la Guardia Civil, se manifestó partidario del enfrentamiento con Herri Batasuna, con tal de conseguir la erradicación del terrorismo.Iñaki Esnaola, miembro de la mesa nacional de Herri Batasuna, señaló, por su parte, a este periódico que el atentado contra la Guardia Civil en Ordizia ha servido de excusa al PSOE para romper con unas conversaciones que a su juicio este último partido no deseaba iniciar. "Yo no creo que el atentado haya sido o dejado de ser contraproducente para el desarrollo de estas conversaciones", manifestó el dirigente radical, para añadir a continuación: "Otra cosa hubiera sido si hubiera habido un largo período de discusiones y se hubiera profundizado en los temas fundamentales para Euskadi. El hecho de que Herri Batasuna se siente en una mesa no tiene porqué significar el cese de la violencia. ETA actúa en base a un programa y al margen de estas coyunturas".

El abogado Iñaki Esnaola afirmó que Herri Batasuna y ETA son cosas bien distintas y que las declaraciones de José María Benegas identificando a ambas organizaciones pone en peligro a los componentes de la coalición abertzale a la que pertenece. "Creo que el PSOE se ha confundido al pensar que nosotros somos interlocutor de ETA; si ellos creen que el único problema es ETA, lo que tienen que hacer es hablar con esa organización".

Con anterioridad a la nueva propuesta socialista de un frente sin Herri Batasuna, y aunque ya el PSOE había decidido, inmediatamente después del mencionado atentado, desentenderse de las conversaciones para la pacificación de la comunidad autónoma, pendientes todavía de que se llegue a configurar la polémica mesa tripartita, el PNV y Herri Batasuna continuaban creyendo en la necesidad de avanzar en el diálogo, según informa Tonia Etxarri desde Vitoria.

Mientras HB se lamentaba de la decisión socialista de retirarse y señalaba que el atentado había servido de excusa al mencionado partido para abandonar la idea de configurar una mesa que no era de su agrado, el jefe del Ejecutivo autónomo, Carlos Garaikoetxea, declaraba: "Los esfuerzos de pacificación y comunicación tienen que continuar".

El Partido Nacionalista Vasco consideró que el atentado suponía una "agresión a la esperanza de paz", pero no lo relacionaba directamente con los intentos de configurar la mesa de conversaciones. En esta línea, el lendakari, Carlos Garaikoetxea, que calificó el atentado como "un intento escandaloso de torpedear las conversaciones", señaló que la mesa tripartita, después del trágico suceso, ya no se podía configurar debido a que el PSOE había desistido de la idea, pero "si el primer intento de normalización no ha sido posible, esperemos que nuestra perseverancia permita que la paz venga a Euskadi".

Por su parte, HB aseguraba que seguía "con el mismo interés de dialogar que en un principio". Un portavoz autorizado de la mencionada coalición indicó que precisamente el atentado "demuestra que hay que sentarse a negociar" y señaló que el hecho de que se produzca un acto de violencia no es fruto de una situación nueva. La mesa nacional de HB tratará hoy la última propuesta de Garaikoetxea: grabar las conclusiones de los encuentros políticos.

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