El 'problema Lefebvre'
Leí con verdadero asombro, en EL PAIS del 14 de los corrientes, página 28, la extraña interpretación de Juan Arias sobre lo que él llama el "problema Lefebre".Tal artículo es una auténtica desinformación.
En efecto no hay un problema Lefebre, sino el problema de esos millones y millones de católicos que están rehusando la reforma conciliar y cuyo intérprete, cerca de la Santa Sede es, efectivamente, Monseñor Lefebre (ex Arzobispo de Dakar, Visitador Apostólico de Africa, Superior General de la Congregacion del Espíritu Santo),etc.
¿Cual es el papel que está desempeñando en Roma? No ser "juzgado" por las dichas Congregaciones romanas, sino defender delante de ellas los derechos imprescriptibles de la doctrina y de la tradición católica, incluida la Santa Misa tal como la restauró el Concilio de Trento.
Como en otros tiempos Domingo de Guzmán y San Francisco de Asís, y San Ignacio más tarde, convencieron al Papa y a la jerarquía de volver a la integridad de la fe y de la tradición católica. Así, Monseñor Lefebre encabeza una moderna contrareforma cuya necesidad empieza a aparecer necesaria a no pocas personalidades romanas. Por esto, y solo esto, está en Roma Monseñor Lefebre.
En cuanto a la "manía de (Monseñor) Lefebre de volver a una liturgia en latín" pienso que a sus lectores les gustará saber cúantos son, en el mundo occidental, los centros donde una multitud de gente aprecia dicha manía. Son 634 centros repartidos en los siguientes países: Francia, Alemania Federal, Argentina, Austria, Bélgica, Canadá, España, Méjico, Estados Unidos, Gran Bretaña, Irlanda, Italia, Australia, Luxemburgo, Malta, Países Bajos y Suiza./ Secrétaire Général Aide au Logement des Méres Travailleuses en difficulté.
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