Francia anuncia inminentes medidas antiterroristas para defender los bienes y personas de Córcega

, El Gobierno francés anunció anoche que antes de que finalice la semana se harán públicas diversas medidas antiterroristas para garantizar los bienes y las personas en la isla de Córcega, escenario en los últimos días de diversos atentados independentistas motivados por la negativa a enfrentar el pago del impuesto revolucionario.La agravación de la situación en Córcega preocupa seriamente a toda Francia. En un punto coincide plenamente el espectro político galo en contra de los independentistas del Frente Nacional de Liberación de Córcega (FLNC): Córcega es parte integrante de Francia y "ningún compromiso es posible„, según expresión del presidente de la República, François Mitterrand.

El FLNC, movimiento clandestino que desde hace una docena de años practica la violencia para conseguir la independencia de la isla de belleza, ha oficializado lo que hasta hace unas horas se sabía, pero que nadie deseaba confirmar: que, en lo sucesivo, tanto los franceses continentales como los corsos de nacimiento pueden ser sometidos al pago del impuesto revolucionario.

Según un comunicado del FLNC, los corsos propietarios de negocios importantes, como algunos franceses "que se aprovechan de la colonización de Córcega", tendrán que participar "en el apoyo a nuestra organización".

Se estima que durante las últimas semanas unas cien personas han sido invadas a efectuar dicha contribución financiera.

El atentado, haré tres días, contra la persona del veterinario de Corte, Jean Paul Lafay, y los cometidos contra los bienes de un farmacéutico y de un hombre de negocios fueron consecuencia de la negativa de todos ellos a pagar el impuesto que la opinión francesa calificaba ayer, con unanimidad, de extorsión de, fondos.

Este nuevo paso de los nacionalistas corsos se valora como una alerta roja sobre la situación de la isla. La degradación alcanzaría cotas inquietantes si, como parece muy probable, el FLNC reanuda sus atentados en el hexágono francés. Ante este panorama, en París y en Córcega, unánimemente, se han acogido favorablemente las palabras del presidente Mitterrand referentes al tema. "No hay compromiso posible", dijo el jefe del Estado, con quienes atentan contra la unidad de Francia, anunciando al mismo tiempo que sus acciones violentas son crímenes que serán castigados como tales por la ley republicana.

El Gobierno socialista, con rapidez vertiginosa, desde que llegó al poder en 1981, intentó solucionar el problema corso por la vía política, concediéndole a la isla un Estatuto particular que le permitiría desarrollar su identidad.

Salvo el FLNC, que no se presentó a las elecciones del-verano último para elegir la Asamblea Regional, todas las fuerzas políticas de la isla, empezando por las autonomistas del doctor Edmond Simeoni, aceptaron la oferta del Gobierno central. Seis meses después se conviene generalmente que las competencias de esa asamblea aún no están bien definidas.