ETApm califica el desenlace del secuestro de Orbegozo como un 'grave contratiempo'

Juan Félix Eriz, el industrial de Elorrio que actuó de mediador en el secuestro del industrial guipuzcoano Saturnino Orbegozo, se encuentra actualmente detenido, al igual que la joven rubia, supuesta dirigente de ETApm VIII Asamblea, que servía de enlace entre el comando que vigilaba al industrial y la dirección de la organización autora del secuestro.

ETApm VIII Asamblea ha reconocido implícitamente no haber cobrado dinero alguno del rescate, en un comunicado en el que amenaza a la familia Orbegozo, a la que acusa de constituir una de las fracciones más intransigentes y reaccionarias de la oligarquía vasca.Esta organización califica el desenlace del secuestro de grave contratiempo, al tiempo que anuncia que continuará sus acciones contra los Orbegozo. Medios cercanos a ETApm VIII sostienen, por otra parte, que la ejecución del industrial fue suspendida horas antes de que se produjera su liberación, después de que la dirección efectuara un análisis político de la situación. Los octavos habrían decidido finalmente aceptar la última oferta de 127 millones presentada por la familia y poner en libertad al industrial guipuzcoano. ,

La esposa de Juan Félix Eriz manifestó ayer a EL PAIS que su marido espera ser puesto en libertad hoy mismo. En una llamada telefónica efectuada ayer de madrugada desde la comisaría de Pamplona, Juan Félix Eriz comunicó a su mujer que iba a ser trasladado a Madrid y que no se encontraba bajo la legislación antiterrorista. La detención de Juan Félix Eriz, un hombre que ha desempeñado papel de mediador en numerosos secuestros, se produjo la nochevieja en su domicilio de Elorrio, cuando la familia se disponía a cenar.

El intermediario fue detenido por actividades clandestinas derivadas de su militancia en el Partido Carlista en los años 1973-1975. Su relación con militantes carlistas refugiados en los últimos años del franquismo en el sur de Francia le llevó a conocer a una serie de exiliados de ambas ramas de ETA. Actualmente trabaja como representante de una serie de empresas vizcaínas del sector siderometalúrgico y sus posiciones políticas le han llevado a defender públicamente la necesidad de una negociación entre las organizaciones armadas y el Gobierno como camino para la paz en Euskadi.

En unas declaraciones efectuadas desde las dependencias policiales en las que se halla detenido, Juan Félix Eriz ha manifestado que se encuentra sorprendido: "Soy el primero en desear que se acaben los secuestros y el cobro de los impuestos revolucionarios, pero sí una familia me pide ayuda, yo no me puedo negar". "Intento que no se pague el rescate, pero, sobre todo, lo que pretendo es que no se produzcan muertes y que no vuelva a derramarse más sangre en Euskadi. Importantes personalidades, como Joaquín Ruiz-Giménez y el abogado Mohedano, han intentado, con el conocimiento del Estado y de toda la opinión pública, desempeñar también el papel de intermediario".