Llegan a Barajas 76 camioneros españoles retenidos en Arabia Saudí durante meses
A primeras horas de la mañana de ayer llegaron al aeropuerto de Madrid-Barajas 76 de los 84 transportistas autónomos españoles que estaban retenidos en Arabia Saudí desde hace cinco meses a causa de una operación fraudulenta de la compañía Transmiera, SA, con un empresario de aquel país. Los 76 transportistas fueron recibidos en el aeropuerto por sus familiares.
Los ocho transportistas restantes se han quedado en Arabia Saudí para embarcar los 96 camiones, que serán trasladados a España el próximo día 4 de diciembre.El subdirector general de Cooperación Internacional del Ministerio de Transportes, Lorenzo González, quien se ha encargado de las negociaciones para el retorno de los transportistas españoles y sus camiones, manifestó que la "operación de retorno ha sido muy difícil, ya que había contratos no ajustados a las normas, irregularidades, desorganización y desconocimiento de la legislación de aquel país". También narró la serie de avatares por los que han pasado los 105 transportistas que inicialmente se trasladaron hasta aquel país -aunque algunos de ellos regresaron ya hace días-, contratados por la empresa Transmiera.
"La empresa", dijo, "se creó ad hoc para este contrato con Arabia Saudí. Al llegar allí, los transportistas comprobaron que en las absurdas condiciones del contrato no podían materialmente efectuar los servicios para los que habían sido contratados". La compañía saudí exigió que se cumpliera el contrato que había firmado con Transmiera, y aquí se inició el problema, ya que "la legislación saudí determina la retención y la responsabilidad de las personas no sólo con los bienes".
Por otro lado, el embajador de España en Arabia Saudí, Manuel Sasot, declaró que "existe ya una querella criminal presentada por el fiscal general del Estado contra Transmiera".
El acuerdo que ha posibilitado el regreso de los camioneros consiste en que las autoridades españolas asesorarán en la demanda que el socio saudí puede presentar contra Transmiera. A la vez, la empresa saudí libera a personas y camiones de todas sus obligaciones, recibiendo a cambio unos 37 millones de pesetas en concepto de débitos individuales. Ambas partes renuncian a toda reclamación posterior, incluidos los transportes realizados y no cobrados.
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