Los jugadores del fútbol-rugby americano ganan su huelga

La Liga oficial de fútbol americano reanudó sus partidos, después de 57 días de huelga y tras un acuerdo entre la asociación de los propietarios de los 28 clubes de la Liga Profesional y la asociación de jugadores. El principio de acuerdo supone para éstos un aumento de sus ingresos en más de 166.000 millones de pesetas. La noticia de la reanudación de la Liga fue primera plana en todos los diarios y abrió los telediarios de la noche, por delante del líder soviético Yuri Andropov y la nueva situación URSS-EE UU.

Los 1.500 jugadores profesionales de fútbol americano deben ratificar el nuevo compromiso, logrado después de arduas negociaciones, en el que los jugadores obtienen mayores beneficios y por distintos conceptos. El nuevo contrato, de cinco años de duración, supone un total de 166.000 millones de pesetas en concepto de salarios y beneficios.Para la actual Liga, que finalizará el próximo 30 de enero en Pasadena con la clásica Superbowl, los jugadores recibirán unos 7.000 millones de pesetas en concepto de beneficios derivados de los derechos de televisión de los partidos.

Con anterioridad, esta fuente de ingresos iba en su totalidad a los propietarios de los 28 clubes de la Liga profesional. La huelga se inició, precisamente, porque la asociación de jugadores solicitaba el 55% de los ingresos por la retransmisión de los partidos. Los clubes tienen firmado un contrato con las distintas cadenas privadas de televisión, que les supone anualmente más de 50.000 millones de pesetas. Los jugadores pidieron la mitad y que se creara una escala salarial que aumentara proporcionalmente a la antigüedad de un jugador en su club.

En la aprobada escala salarial mínima, los jugadores percibirán, además del salario, unos bonus que oscilan entre 1,2 y 7,2 millones de pesetas, según los años de profesionalismo. Mejoran también las primas de los seguros, salarios y otros beneficios.

Para las amas de casa norteamericanas se acabaron los fines de semana con paseos en el parque y pic-nic, porque los maridos han vuelto a quedar pegados ante la televisión al reanudarse el domingo la Liga del deporte rey en Estados Unidos, que aún es el fútbol-rugby americano.