Rentable error de 'El millonario'
Gregory Peck había interpretado ya la mayor parte de sus películas famosas cuando fue tentado por las productoras inglesas. 350.000 dólares por protagonizar dos películas era una sugestiva suma en 1954. Y aún hoy. Y la aceptó. Sin duda, Peck vivió cómodo y feliz con tales honorarios, pero corrió el riesgo de hundir su obra. Pocas veces o nunca había interpretado historias tan equivocadas; rara vez se encontró mas lejos de un director.Una de esas dos películas fue El millonario, versión de un divertido cuento de Mark Twain en el que un hombre pobre encuentra un billete de un millón de libras; con tan indivisible riqueza en la mano, se le abren las puertas del éxito. La segunda película, Llanura roja, ya no fue dirigida por Ronald Neame, pero no por ello superó la floja impresión obtenida en la primera.
Ronald Neame sigue siendo un valor fuerte del cine británico aunque no haya dejado tras de sí una obra importante y aunque la mayor parte se haya financiado con capital norteamericano. La fuga de Zarahin, La aventura del Poseidón y Odessa son algunos de sus últimos títulos.
Tal como se vio en la adaptación de El millonario, Ronald Neame no tenía como director la impronta que demostró en las demás gestiones. Está aún por estrenar en España su último título interpretado por Walter Mathau. También El millonario se distribuyó en todo el mundo. Un hombre con un millón se tituló en los Estados Unidos y El billete de un millón de libras, en Inglaterra. No triunfó en ningún sitio.
A la situación argumental de partida no se añadieron estímulos nuevos. En la memoria de los espectadores sólo quedó el recuerdo de una fotografía brillante; en la de Gregory Peck puede que el de sus honorarios. Recuperó su carrera poco después al interpretar El hombre del traje gris, Moby Dick y Horizontes de grandeza.
El millonario se emite hoy a las 21.40 por la segunda cadena.
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