El PSOE ha preparado cinco decretos sobre deporte

"Con prisa y sin pausa" afrontará el PSOE el problema de las auditorías en las distintas federaciones deportivas a lo largo de sus primeros cien días de gobierno. Cinco decretos que abran el camino a su actuación están ya preparados. Descentralización del CSD, democratización de clubes y federaciones, plan de instalaciones y nueva orientación en el reparto de los fondos son actuaciones prioritarias, junto con la creación de la Confederación de Deportes y el cumplimiento de lo que ya dice la ley en materia de educación física. Por otra parte, el cargo de secretario de Estado para el Deporte está sin dilucidar, a la espera también de si habrá Ministerio de Cultura.

No se descarta un independiente para el cargo, aunque de ser alguien del partido el nombramiento sería para Miguel Angel Martínez, actual coordinador en materia deportiva.A pesar del problema presupuestario general, fuentes socialistas anunciaron que podría asegurarse un incremento para el dinero destinado al deporte con relación a años anteriores. En la distribución de dichos fondos es en donde el PSOE intentará marcar su personalidad, diferenciada de lo que fue usual durante los últimos lustros. Según los técnicos socialistas, el deporte español podrá comprobar que ellos van a ser mucho más generosos que los anteriores administradores, pero que a la vez exigirán un control riguroso. La inversión e instalaciones será importante y está prevista la realización de un plan.

Una vez que la Administración socialista esté asentada en los cargos del deporte, ésta piensa abrir una fase de amplio diálogo con todas las entidades interesadas, tanto públicas como privadas. A través de estas reuniones se abrirá el camino para la elaboración de unos programas de actuación deportiva. El peso fundamental en materia de promoción lo llevarán los ayuntamientos y las entidades autonómicas, mientras que el mundo de las federaciones podrá ver ampliados sus presupuestos siempre que cumpla una serie de requisitos: presentación de programas, sujección a control y supervisión de los fondos, tanto propios como públicos, que reciban. El rigor con que se llevará el control fue definido taxativamente: "aquella federación que no respete las normas o no se acoja a los nuevos principios no recibirá ni un solo duro".

Para llevar a cabo esta política de concertación económica, el PSOE piensa resolver con prontitud la herencia que le ha dejado el Gobierno de UCD. En primer lugar, se examinarán todas las auditorías realizadas, de las cuales aquéllas que las merezcan irán "inmediatamente" a la justicia ordinaria, una política de ir "con prisa y sin pausa", en contra de lo que se afirma hizo la UCD, que fue ir sin prisa y con pausa, supondría también una explicación a todas las federaciones de cómo han de llevar de ahora en adelante su contabilidad. El control contable se ampliará también a los fondos propios de cada federación, única forma de conocer con exactitud la salud económica de cada entidad.

A lo largo de una serie de decretos, el PSOE piensa abrir el camino de su actuación deportiva. Estos decretos serán, en algunos casos, sustitutorios de otros ya existentes y sobre los cuales el actual secretario de Estado para el Deporte en funciones, Jesús Hermida, confesó radicaba la principal aportación de su equipo de trabajo al deporte español. Esta aportación quedará si no totalmente, sí al menos parcialmente derogada. El PSOE, de momento, piensa aplicar una interpretación progresista a la ley de Cultura Física y Deportes, que no modificará en una primera fase. El PSOE derogará el reciente decreto ley sobre relaciones internacionales, por considerarlo innecesario, al igual que el relativo a clubes y federaciones, calificado de escasamente democrático. Aparecerá un nuevo decreto ley sobre clubes y federaciones destinado a la total democratización de estas entidades, a partir de la tesis de un deportista un voto, un club un voto.

Ello supondrá, por ejemplo, que todo afiliado a un club podrá ser elegido y elegible para el cargo de presidente sin requisito previo de firma, que todos los clubes quedarán igualados y que los deportistas podrán estar mejor representados en las asambleas federativas. En lo relativo al Consejo Superior de Deportes, este sufrirá una modificación en cuanto a la composición de su pleno, al que se quiere dotar de mayores competencias y estructura más amplia. A efectos de su representación en dicho pleno, las federaciones se agruparán en la confederación de Deportes, nuevo organismo que se intenta impulsar como el portavoz ideal del mundo federado.

Otra modificación será la relativa al Real Decreto ya existente sobre disciplina deportiva, que dio origen al Comité Superior de Disciplina Deportiva, organismo que hasta el momento ha resultado ineficaz y que ha tenido un excesivo interés por declararse continuamente incompetente en aquellas materias que podrían ser conflictivas. Para muchos deportistas y clubes, dicho comité ha sido una fuente constante de decepciones. En este sentido, el PSOE se propone a corto plazo modificar su composición, que sus miembros sean elegidos por el pleno del CSD, y garantizándole una independencia que hasta el momento no ha tenido. Dicho comité velará porque la Constitución deba estar contemplada en los usos y costumbres de directivos y deportistas.

De nuevo cuño, pero reiteradamente anunciado, será el proyecto de ley regulador del deporte profesional, en el que se pretende diferenciarlo esencialmente del amateur. A una nueva regulación se someterán también las agrupaciones deportivas, a las que se quiere dotar mejor económicamente con el fin de promocionar el asociacionismo deportivo.

Prioritaria será también la negociación entre ayuntamientos y entidades públicas (centros docentes, cuerpos de seguridad del Estado, empresas estatales) e incluso entidades privadas, para que se llegue a una plena utilización de aquellas instalaciones deportivas hasta ahora disfrutadas con carácter exclusivo.

Por último, se procurará ampliar a tres o cuatro, las horas dedicadas a la educación física en los primeros niveles de la EGB, se reciclará y formará al profesorado encargado de impartir estas clases y se irá á la contratación de licenciados de Educación Física, que actuarán como tutores o coordinadores en cada centro de enseñanza, plenamente equiparados al resto del profesorado. Para octubre de 1983, inicio del curso 84-85, la educación física deberá estar generalizada en toda la EGB.

Nombramientos

Para el cargo de secretario de Estado para el Deporte se han difundido varios nombres, la mayoría a título de rumor. El primero en aparecer fue Javier Moscoso quien como miembro de la junta directiva de la Federación Española de Fútbol, no se distinguió en un sentido crítico y cuya aportación al deporte es desconocida. Otro candidato rumoreado fue José María Cagigal, proclive a caerse de las listas. Con posterioridad apareció el nombre de Marcos Becerro, no descartado, y como candidato socialista es fuerte la opción de Miguel Angel Martínez. A hombres del partido, como el arquitecto Fernando Andrés se les ha considerado fijos en el organigrama del Consejo Superior de Deportes.