_
_
_
_

Miguel Ríos fue detenido tras negarse a actuar en la plaza de toros de Oviedo

El cantante Miguel Ríos fue detenido en la noche de ayer en Oviedo tras negarse a actuar en la plaza de toros de la capital del Principado de Asturias debido a que su equipo electrónico y de rayos láser se había mojado y corría el riesgo de electrocutarse, según sus propias explicaciones. Como consecuencia de esta decisión se produjeron graves incidentes de orden público en las calles de Oviedo protagonizados por muchas de las 13.000 personas, en su mayoría jóvenes, que llenaban la plaza de toros para escuchar al intérprete de rock.

Mientras que, al cierre de esta edición, Miguel Ríos continuaba en la comisaría y su abogado estudiaba la posibilidad de poner una querella por detención ilegal, en las calles de Oviedo quedaban las huellas de roturas de lunas de algunos establecimientos y actuaciones muy duras de la policía que, en el intento de disolver a los manifestantes, lanzó pelotas de goma y utilizó sus defensas contra grupos de jóvenes que se habían lanzado a las calles próximas a donde iba a celebrarse el recital en el marco del ambiente festivo que brindaban las fiestas de san Mateo de esta ciudad.A primera hora de la madrugada de hoy Miguel Ríos estaba todavía prestando declaración en comisaría, según informaba desde Oviedo José Manuel Vaquero, como consecuencia de la denuncia presentada por la Sociedad Ovetense de Festejos (SOF), organizadora del frustrado recital, contra el cantante por supuesto incumplimiento de contrato. Miguel Ríos justificó su negativa a actuar en la tarde de ayer debido a la ausencia de toldos para proteger de la lluvia a su equipo e instrumental, dotado de rayo láser.

Posteriormente, según algunos testigos, el chófer de Miguel Ríos se bajó los pantalones dando la espalda al público desde el escenario lo que, unido a la suspensión del recital, desató las protestas del público y los incidentes ya reseñados. A través de alguna emisora de Oviedo pudo escucharse cómo Jesús Ortiz y Alejandro Ortega, de Radio Oviedo, invocaban ante los policías su condición de informadores para no ser golpeados.

Tras la suspensión del recital por lo menos 4.000 personas se concentraron ante el hotel donde se alojaba el cantante a quien increparon aunque no llegaron a agredirle. Precisamente mientras se encontraba cenando en el restaurante de este hotel la policía detuvo discretamente al cantante y lo trasladó a la comisaría. Mientras tanto varios grupos de jóvenes trataron de derribar las vallas de los jardines de La Herradura donde actúan las atracciones contratadas por la SOF para las fiestas de San Mateo. Los organizadores decidieron suspender los otros festejos que se iban a celebrar en estos jardines para evitar nuevos incidentes.

Fuentes de la SOF aseguraban a última hora de ayer que cuando el cantante anunció su intención de no actuar había tiempo suficiente para colocar los toldos y que, por tanto, su actitud resultaba inexplicable. Por el contrario, Miguel Ríos argumentó que el montaje de su equipo no podía simultanearse con el de los toldos. Según fuentes próximas al cantan te en su contrato de actuación figuraba una cláusula en la que constaba que debería actuar protegido, junto con su conjunto y equipo, por unos toldos.

Antes de pasar por comisaría, Miguel Ríos pidió disculpas a los ovetenses a través de una emisora de radio y agregó que se siente en deuda con la capital del principado de Asturias.

La SOF había vendido 13.000 entradas a una media de 450 pesetas cada una, importe que será devuelto hoy a sus compradores, según fuentes de la sociedad organizadora.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_