Permanecen en estado crítico 2 de los 34 heridos en el accidente aéreo ocurrido el lunes en Málaga

Dos personas permanecen en estado crítico, ingresadas en la residencia sanitaria Carlos Haya, de Málaga, como consecuencia de accidente del DC-10 de la compañía Spantax ocurrido el pasado lunes en el aeropuerto malagueño. El total de heridos ingresados en el citado centro es de 34, de los cuales, ayer se dieron tres como altas definitivas. En la unidad de quemados permanecen cuatro personas, después de que la súbdita canadiense Karen Maloney fuera trasladada a otra planta. Continúan en esa unidad Sara Sisia, en estado crítico; Anne Novak, también en estado crítico, y Seagle Siegal y Arsenio Ladrada, ambos en estado grave.

También continúa grave el único enfermo que permanece en la unidad de vigilancia intensiva, Joel Blickskein.Cuatro cadáveres fueron trasladados ayer a Madrid por vía aérea desde el aeropuerto de Málaga, y dos de los féretros serían mas tarde transportados a Santiago de Compostela para ser inhumados en sus lugares de origen.

Mientras, un grupo de los supervivientes de la catástrofe aérea del pasado lunes se queja de la "nula atención" que la compañía ha tenido hasta ahora con ellos. Según informa Ignacio Lewin, un grupo de tales pasajeros señalaba ayer que comprendían que los muertos son lo más importante, y es preciso atender todo lo que se refiera a ellos, "pero nosotros estamos vivos y, en algún caso, hemos perdido todo lo que teníamos, desde la ropa y efectos personales hasta toda la documentación, y queremos que, como mínimo, se nos informe de nuestros derechos y no se nos mande de un lado para otro para quitarnos de en medio".

Por su parte, la compañía Spantax, consultada por EL PAIS, manifestó que ha salido con destino a Málaga un equipo médico de la base aérea de Torrejón de Ardoz para ocuparse de los 33 heridos norteamericanos que quedan aún hospitalizados. Según Spantax, la compañía aseguradora se hará cargo de lo s gastos ocasionados por estos heridos. Con respecto a los supervivientes ilesos, dicha fuente aseguró que "la compañía está atendiendo a todos los que acuden a ella o llaman por teléfono, aunque es posible que, por la gravedad de otros hechos, alguno pueda quedar en un segundo plano. De cualquier forma, todos los afectados tienen unas vías de reclamación a las que pueden acudir".

Fuentes de la patronal del seguro informaron ayer a Europa Press que las compañías La Equitativa y La Unión y el Fénix deberán pagar alrededor de 5.300 millones, en conceptos de seguro del aparato y responsabilidad civil, a causa del accidente de Málaga.

Dado que el aparato quedó totalmente destrozado, la póliza del seguro de casco será hecha efectiva en su totalidad (4.300 millones de pesetas), que, unida a los mil millones previstos por responsabilidad civil, hace un total de alrededor de 5.300 millones. De ese total, La Equitativa tendrá que abonar alrededor de 3.800 millones, y La Unión y el Fénix, unos 1.500 millones.

Finalmente, y en torno a las posibles causas que motivaron el accidente, el testimonio de un pasajero norteamericano que fue grabando en un magnetófono todos los momentos de la operación de despegue puede ayudar en las investigaciones que se siguen.

Dicho testimonio sonoro, ofrecido ayer por RNE y TVE a través del corresponsal de Radio Nacional en Nueva York, Javier Martín Domínguez, acaba con unas palabras del pasajero-relator cuando el DC- 10 comienza a tener problemas rodando por la pista y los angustiosos gritos de los pasajeros citando se sale de la pista.

De otro lado, Francisco González de Aguilar Enrile, Marina Pérez Buide y Pilar Ribal Simó, auxiliares de vuelo del DC-10 accidentado en Málaga, los únicos miembros de la tripulación que están en Palma de Mallorca, relataron a los informadores, en la sede de Spantax en dicha ciudad, sus impresiones y experiencias del trágico accidente. Y, según sus conclusiones, el avión no llegó a despegar. Cuando iniciaba la carrera de despegue se oyó un ruido similar a la explosión de un neumático y el aparato comenzó a trepidar violentamente.

Mientras, el nuevo avión DC-10 de Spantax, adquirido, en régimen de alquiler, a la compañía norteamericana Air Florida para sustituir al siniestrado, hizo su primer viaje ayer, desde Palma de Mallorca a la República Federal Alemana.

Entierro del periodista Manuel Dompablo

Varios cientos de personas asistieron ayer a las exequias del periodista Manuel Dompablo, delegado de la agencia Efe en Nueva York, que falleció en el accidente aéreo de Málaga. Tras una misa de cuerpo presente en la parroquia madrileña de la Resurreción del Señor, se procedió al traslado de los restos al cementerio de Carabanchel Alto, donde fueron inhumados.A las exequias del joven periodista desaparecido se sumaron familiares, amigos y numerosos representantes de sus compañeros de la agencia Efe y de otros medios informativos.