Aumentan el nerviosismo y la debilidad del mercado

Las incógnitas sobre los posibles resultados electorales en las elecciones al Parlamento andaluz continúan pesando en el ánimo de los inversores, que no se deciden a abandonar sus posturas vendedoras, a pesar de que las bolsas llevan acumuladas unas pérdidas de cierta consideración en las últimas reuniones. Ayer, la mayor presencia de órdenes vendedoras se reprodujo y generó nuevos repliegues en los índices generales de los cuatro mercados.La característica que confirió una cierta peculiaridad a las reuniones celebradas ayer fue el nuevo incremento de los saldos vendedores en el grupo bancario, después de que los ímpetus iniciales de la oferta en este sector, se habían moderado aparentemente el pasado miércoles. La novedad fue mal acogida por las entidades de este sector, hasta el punto de que Banesto y Central aceptaron recortar los precios de sus acciones en el mercado madrileño en tres puntos cada uno, mientras que el resto de sus compañeros cerraba en unas posiciones de precario equilibrio, con un amplio predominio de las órdenes vendedoras, y sin que se esperen para hoy grandes cambios en estos planteamientos.

Tampoco las eléctricas consiguieron hacer frente a las nuevas órdenes de venta generadas, que venían a acumularse a las que quedaban pendientes de días anteriores. Las pérdidas se constituyeron en mayoría, y las expectativas compradoras se antojaban a los especialistas como cada vez más remotas para la sesión de hoy, la última de esta conflictiva semana.

Y esta, precisamente, es otra de las características que están definiendo las estrategias planteadas por los principales inversores institucionales: la convicción de que en la próxima tanda semanal, y a la vista de los resultados electorales concretos, se produzca una cierta reanimación del mercado.

Porque lo que está claro es que las dos mejoras de alguna significación que se produjeron ayer, no dejan de tener un carácter puramente testimonial. Dragados, subiendo cinco puntos, representaba el fin último de una operación planteada con anterioridad, y cuyo antecedente inmediato fue el barrido de los títulos que quedaban pendientes de vender el pasado miércoles, por parte de uno de los grupos que con mayor insistencia están actuando en este valor en las últimas fechas.

Por su parte, la recuperación de Petróleos, que se apuntaba una mejora de un punto en el mercado madrileño, con tener una importancia destacada en la diferencia positiva que arrojaba en solitario el índice de químicas, correspondió, según los expertos, a una corrección previsiblemente técnica, que se generaba desde las inmediaciones del grupo tutor de este valor. Petróleos había iniciado una pendiente declinante que le había hecho perder un buen porcentaje de su cotización, sin que hasta ayer se hubiese podido apreciar ningún intento por remediar sus penurias.

Las sociedades de inversión, o mejor dicho algunas de ellas, son los únicos valores que aún cuentan con discretos flujos compradores. La razón de esta persistente demanda selecta parece continuar constituyéndolo la posibilidad de que algunas de las sociedades de cartera sigan los ejemplos marcados por INSA y VAMOSA, y se produzcan algunas liquidaciones que resultarían beneficiosas para los accionistas.