Los Reyes recibieron al mundo de la cultura en una carpa instalada en los jardines de la Zarzuela

Una amplia tienda o carpa de lujo instalada en los jardines de palacio de la Zarzuela fue la novedad de este año con relación a los anteriores en la tradicional recepción que los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Soria, ofrecieron al mundo de la letras en la tarde de ayer. La temperatura primaveral permitió que se abrieran las grandes puertas ventanales que dan al jardín, donde se hallaba instalada la gran tienda, que se desbordaba con más de tres centenares de escritores, dramaturgos, poetas, editores y periodistas que pudieron pasear a sus anchas por el jardín.

Junto a los Reyes se hallaban algunos representantes del Gobierno, empezando por su presidente Leopoldo Calvo Sotelo, y la ministra de Cultura, Soledad Becerril El huésped de honor, Octavio Paz que había recibido por la mañana de manos del Rey, el Premio Cervantes, iba acompañado por su es posa, Mary Jo, flanqueados siempre por los poetai; Luis Rosales y Pere Gimferrer. El poeta mexicano fue literalmente asaltado por los asistentes a la recepción.El presidente de la Real Academia Española de la Lengua, Dámaso Alonso, parecía encabezar la nutrida lista de académicos que asistieron al acto: el secretario perpetuo Alonso Zamora Vicente Pedro Sainz Rodríguez, Pedro Laín Entralgo, Camilo José Cela Manuel Halcón y Carlos Bousoño entre muchos otros. La poesía también estaba representada con nombres como los de Claudio Rodríguez, Francisco Brines, Félix Grande y Manuel Ríos Rui z. Francisco Nieva se mostraba inquieto ante el inminente estreno de su Coronada y el toro, previsto para el próximo martes. Otros hombres del teatro presentes eran Antonio Buero Vallejo, Antonio Gala, Adolfo Marsillac, Ana Diosdado, Pedro Larrafíaga y Enrique Llovet. Forges hacía dibujos y caricaturas a quien se lo pidiera. Del mundo de la Prensa estaban, entre otros, José Ortega Spottorno, Guillermo Luca de Tena, Pedro J. Ramírez y Miguel Angel Aguilar. La filosofía estaba presente en el abanico que va desde José Luis Aranguren hasta Fernando Savater. Pero, sin duda, el mundo de la ampliamente representado, desde Manuel Andújar y Rosa Chacel hasta Leopoldo Azancot, Baltasar Porcel o el último premio de la Crítica, José María Guelbenzu. Un grupo de escritoras, entre las que se hallaban Rosa Montero, Montserrat Roig y Carmen Martín Gaite, optaron por sentarse en el suelo, al lado del césped, donde fueron acompañadas, entre otras personas, por los filósofos Aranguren y Savater.

Además de los ya citados, no faltaban intelectuales como Hernández Gil, políticos como Iñigo Cavero o Ricardo de la Cierva, y autoridades relacionadas con la cultura, como Matías Vallés, director general de Promoción del Libro y la Cinematografia; Javier Tusell, de Bellas Artes; Ignacio Aguirre, de la Información; Juan Cambreleng, de Teatro; Robles Piquer, de Radiotelevisión, Amalio Graíño, de Juventud y Promoción Sociocultural, y Jesus Hermida, de Deportes.

La recepción se prolongó durante tres horas de paz y de discreta algarabía frente al lento y dorado crepúsculo madrileño de ayer.