El presidente francés participa por primera vez en el Día de la Mujer Trabajadora

Por primera vez en Francia, un Gobierno se asoció al Día Internacional de la Mujer Trabajadora que se celebró ayer. El presidente de la República, François Mitterrand, recibió a 450 mujeres en el Palacio del Elíseo y anunció medidas concretas en favor del binomio, hombre igual a mujer. Como el aborto será próximamente gratuito en Francia, la lucha feminista inicia una nueva etapa.Ya ha transcurrido algún tiempo, y ya se han producido algunas cosas, desde que, en 1802, Napoleón suprimiera una ley que preveía la creación de escuelas para niñas con un postulado contundente: "A las mujeres les basta con ser cocineras o cortesarias".

Durante los últimos diez años, las francesas han conseguido la despenalización del adulterio, la responsabilidad parental compartida, la desaparición de las discriminaciones laborales, la prohibición de la ley que establecía la desigualdad de los sexos, la contracepción libre y gratuita y el aborto, que, a partir del próximo mes de septiembre, será pagado por la Seguridad Social.

Pero las francesas no están satisfechas, ni mucho menos, aunque estiman que la primera etapa del feminismo agresivo ha pasado a la historia, como lo expresa la cofundadora de la Liga del Derecho de las Mujeres, Anvie Sugier, ingeniera en el Comisariado de Energía Atómica: "Para luchar contra las discriminaciones, las mujeres se vieron obligadas a evidenciar sus diferencias. Ahora, yo quiero un mundo con hombres y con mujeres".

Pero la batalla continúa. Las mujeres representan el 44% de los trabajadores de Francia, pero el 60% están en paro y el 75% cobran el sueldo mínimo. De media, ganan el 46% menos que los hombres. Las mujeres no representan más que el 11% de los obreros cualificados. A nivel de cuadros, las mujeres no existen prácticarnerte.