_
_
_
_

España es el único país industrial que ha perdido puestos de trabajo ininterrumpidamente desde 1976, según Rafael Termes

"La pérdida de puestos de trabajo continúa a una tasa absolutamente alarmante, con el agravante de que desde 1976 España es el único país industrial que ha perdido puestos de trabajo año tras año", ha declarado Rafael Termes, presidente de la Asociación Española de Banca Privada (AEB), en una reciente conferencia pronunciada en el Banco de Sabadell.

La firma de dos importantes acuerdos de contención salarial para los dos últimos ejercicios, el Acuerdo Marco Interconfederal (AMI) y el Acuerdo Nacional sobre Empleo (ANE), no han logrado quebrar la continua tendencia a pérdida de empleos, reducción de la población activa e incremento del paro. "La contención en el ritmo de crecimiento del paro si se produjo en 1981", reconoce Termes, "pero a un nivel tan débil, que el aumento en las cifras absolutas de paro es prácticamente igual al del año anterior".La tasa de paro duplica a la media de los países industriales y la caída del empleo es 3,5 puntos superior a la de los citados países en los dos últimos años. El Reino Unido, la nación que presenta peores resultados del conjunto de países industriales a excepción de España, tiene una tasa de paro inferior en más de tres puntos a la nuestra y casi medio punto menos en la caída de empleo.

Los últimos datos sobre desempleo facilitados por la Encuesta de Población Activa del Instituto Nacional de Estadística y por el Instituto Nacional de Empleo ponen de manifiesto el constante aumento del paro. Las estadísticas del Fondo Monetario Internacional, por otra parte, avalan las palabras de Rafael Termes: "Mientras unos países hacen un ajuste durante uno o dos años -parte del cual es una reducción de puestos de trabajo- en España llevamos seis años destruyendo puestos de trabajo y todavía no se ha abordado a fondo la reconversión industrial".

Los mil empleos diarios que iba a crear la aprobación del Estatuto de los Trabajadores, según declaraba reiteradamente el ex ministro de Trabajo y ex secretario general de UCD, Rafael Calvo Ortega, han quedado finalmente en agua de borrajas.

Según la Nota Económica de febrero, del Ministerio de Economía y Comercio, "el empleo continúa mostrando una tendencia decreciente, si bien las caídas de las cifras de ocupados se han desacelerado sensiblemente a lo largo de 1981 y, particularmente, en el tercer trimestre, en el cual el empleo total sólo disminuyó en 2.900 personas". A ello habría que añadir el incremento de 91.400 parados, con lo que las cifras de desempleo a finales del tercer trimestre de 1981 -según datos de la Encuesta de Población Activa- ascendió a 1.877.800 personas y la tasa de paro se situó en el 14,7%.

La evolución de los costes laborales unitarios, según el último número de Informes y Estudios de la CEOE, que recoge análisis comparativos realizados entre distintos países por el Dresdner Bank, refleja una cierta mejoría, pero "hay que resaltar que España sólo fue superada por Gran Bretaña en cuanto a encarecimiento relativo del coste salarial por unidad producida". La contención salarial del ANE y del AMI ha supuesto un avance, pero no ha sido suficiente. "No hay que olvidar que al hablar de costes salariales se incluyen los gastos adicionales, el principal de los cuales, cuotas de la Seguridad Social, sigue siendo todavía muy elevado en nuestro país. Por todo ello, no es de extrañar que el coste salarial por hora trabajada siga creciendo todavía a tasas que superan en varios puntos el nivel de inflación".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_