Los militares recuperan el poder en Ghana mediante un golpe de Estado

El régimen civil del presidente Hilla Limann, en Ghana, fue derrocado durante la noche del miércoles al jueves por un golpe militar dirigido por el capitán de aviación John Jerry Rawlings, de 35 años de edad. Rawlings, que es la segunda vez que asume el poder por estos medios, ha implantado el toque de queda y ha justificado su acción en la grave situación económica de Ghana. El presidente destituido se encuentra arrestado en su domicilio.

Durante el golpe, el quinto que padece el país desde su independencia en 1957, se produjeron enfrentamientos en torno al campo militar de Burma, en los que, al parecer, ha habido un número indeterminado de muertos. La radio de Ghana informó ayer que "soldados incontrolados" habían cometido actos de pillaje en una ciudad no especificada, y acusó a los seguidores del régimen derrocado de tratar de corromper al Ejército para provocar disturbios. Las fronteras con los Estados vecinos han sido cerradas y las comunicaciones aéreas interrumpidas. Según fuentes generalmente bien informadas, han sido detenidos varios ministros.En una alocución dirigida al país a través de radio Acera, el capitán Raw1ings anunció la creación de una Organización para la Defensa del Pueblo y el nombramiento del general Arnold como comandante en jefe de las fuerzas armadas. El nuevo hombre fuerte de Ghana dijo que no pretendía permanecer durante mucho tiempo al frente del país, y que el objetivo de su acción era el restablecimiento del orden y la libertad en el país y levantar la situación económica.

Una de las primeras medidas adoptadas por el nuevo régimen ha sido la reducción del precio de los transportes públicos y de los productos de primera necesidad.

Raw1ings se ha comprometido a transformar la estructura social y económica de Ghana. Dijo que el presidente Limann había colocado al país al borde de la catástrofe durante los dos años de su mandato, y que era urgente actuar para poner fin a esa situación.

Según los observadores, la degradación de la situación económica y política de Ghana durante los últimos meses parece dar la razón al capitán Rawlings, que, tras entregar el poder a los civiles en 1979, señaló que Limann sería incapaz de acabar con el contrabando y la corrupción.

El capitán Rawlings, que goza de gran prestigio entre la juventud del país, encabezó la revolución que el 4 de junio de 1979 llevó al poder a un Consejo Revolucionario de las Fuerzas Armadas. Inmediatamente después desencadenó una campaña de saneamiento, que se saldó con la eliminación del presidente Acheampong y siete oficiales superiores.

Ante las divergencias entre los militares del Consejo Revolucionario, el capitán Rawlings organizó unas elecciones generales y entregó el poder al vencedor de las mismas, Hilla Limann, en septiembre de 1979. Limann, dirigente del Partido Nacional del Pueblo, estaba considerado en aquella época como el heredero político del primer presidente de Ghana, el doctor Kuame Nkrumah.

Sin embargo, Rawlings -comenzó pronto a criticar la actuación de los civiles, a quienes acusó de tratar de restaurar "el anterior orden corrupto".

Un mosaico de etnias

La República de Ghana, independiente desde 1957, cuenta con diez millones de habitantes. Este país es un auténtico mosaico de etnias -hay cerca de ochenta-, procedentes de sucesivas inmigraciones. Los incidentes tribales son frecuentes. El idioma oficial es el inglés, pero la población habla más de cincuenta lenguas.