La policía y la Constitución

No cabe duda de que la carta del comandante del Ejército señor Morales, que publica el periódico EL PAIS en su número 1.738, con fecha 5 de diciembre de 1981, bajo el título "El Ejército y los ultras", debe haber supuesto un alivio y un punto de esperanza para muchos demócratas españoles que vivimos amedrentados continuamente por una sistemática información de signo muy pesimista por parte de los principales medios de difusión en relación con la viabilidad de nuestra democracia.Ya es hora de que la Prensa y demás medios de comunicación social demócratas repartan optimismo, teniendo en cuenta, como es lógico, los problemas reales que padecemos, sin exageraciones y sin miedo, y que los que deseamos la democracia repartamos también valor y optimismo y, al igual que el comandante señor Morales, demos testimonio público a fin de que los enemigos de la convivencia no se crezcan y nos subestimen, máxime cuando lo tenemos todo para triunfar: la razón que da el casi ciento por ciento de la voluntad popular reflejada en la composición de las dos Cámaras y el deseo de esta mayoría de vivir en paz y al amparo de la ley.

Que sepan de una. vez para siempre esas minorías que no quieren nuestra pacífica y civilizada convivencia que somos muchos los españoles que estamos empeñados en defender la democracia y, como consecuencia, nuestro ordenamiento constitucional, y que entre estos muchos están las instituciones militares y civiles./

, Subcomisario del Cuerpo Superior de Policía, secretario de organización de la Unión Sindical de Policías en Córdoba.