Varias organizaciones empresariales no patronales se concentran alrededor de la CEOE

Una buena parte de las organizaciones empresariales no patronales (Círculo de Empresarios, Asociación para el Progreso de la Dirección, Cámaras de Comercio, etcétera) y personalidades pertenecientes al mundo de la banca y de entidades sectoriales y territoriales de los empresarios se concentrarán próximamente alrededor de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) a través del Consejo Asesor del presidente de la patronal, Ferrer Salat, que está a punto de constituirse. Por otra parte, en las próximas semanas habrá cambios en las presidencias de algunas de estas instituciones al cumplirse el mandato por el que dichas personas fueron elegidas.

El Consejo Asesor del presidente de la patronal, Carlos Ferrer Salat, está próximo a quedar constituido, estando pendiente todavía de determinar algunas de las personas que formarán parte de él. Este consejo, que estará coordinado por Juan Miró Chavarría, consejero delegado de Explosivos Río Tinto, ha tenido mayores dificultades de formación de las que inicialmente se preveían. Juan Miró abandonó la vicepresidencia de CEOE en la última asamblea general de la patronal, en el pasado mes de septiembre, quedando encargado entonces de conseguir el acercamiento de las organizaciones empresariales no patronales, a la CEOE a través de un Consejo Asesor del que formasen parte los primeros nombres empresariales del país, en el plazo más breve posible.En este momento ya se ha llegado a un acuerdo con las personas que formarán parte de él del Círculo de Empresarios (al que Miró pertenece), y que serán, previsiblemente, Santiago Foncillas, Rafael del Pino, Claudio Boada, José María López de Letona y algún otro socio. También hay acuerdos más o menos cerrados con las Cámaras de Comercio (a través de José María Figueras, Adrián Piera, etcétera) y con la Asociación para el Progreso de la Dirección. La mayor parte de las personas que se integrarán en el Consejo asesor pertenece a las tres instituciones. Todavía no han elegido sus representantes la banca y organizaciones patronales de territorios como Cataluña o el País Vasco.

Los motivos del retraso existente para que el Consejo quedase definitivamente constituido son de dos tipos: en unos casos, su coordinador ha preferido que sean las propios instituciones las que nombren sus representantes en él, y éstas todavía no se han puesto, de acuerdo; en otros, la tensión habida hasta ahora entre la misma patronal CEOE y el Gobierno de Calvo Sotelo (el anterior y el recientemente nombrado) ha hecho repensar a algunos empresarios su presencia en el Consejo. En cualquier caso, parece casi seguro que en las próximas semanas se pueda hacer pública su composición definitiva.

Para la patronal tendrá mucha significación que alrededor de su presidente se aglutinen las personas que representan a las instituciones empresariales más importantes del país, pues de esta forma a la unidad patronal existente por las bases (exceptuando la presencia de UNIPYME, patronal de las pequeñas y medianas empresas, escindida de CEOE hace unos meses y cuya verdadera representatividad está todavía por evaluar de un modo efectivo) se le añadirá la unidad de criterios por la dirección, integrando en las decisiones de la CEOE a los empresarios más influyentes. Conviene destacar, sin embargo, el carácter asesor del Consejo que coordinará Miró Chavarría, esto es, no decisorio a la hora de una votación concreta.

Garrigues deja la presidencia de APD

La constitución del Consejo Asesor coincidirá casi en el tiempo con el cambio en la presidencia de algunas de las instituciones empresariales más solventes que tendrá lugar en los próximos días, semanas o primeros meses de 1982. Es el caso, en primer lugar, de la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD). Su presidente, Antonio Garrigues Walker, abandona la titularidad de APD para desvincular su actividad política (hasta ahora centrada en la creación de clubes liberales, que previsiblemente podrán ser el germen de alguna formación política nueva). Para el próximo día 22 está convocado en principio el consejo rector de la entidad, que estudiará -previo informe de una comisión creada ad hoc para este tema y, formada por los anteriores presidentes de APD, Enrique García Ramal y Gabriel Barceló, y por el director general actual, Bernardino Herrero- la personalidad del nuevo presidente. Casi con toda seguridad éste será el actual presidente del Instituto Nacional de Hidrocarburos, Claudio Boada, aunque todavía no está cerrada la posibilidad de otra candidatura.

El consejo rector actual de APD está formado por las siguientes personas: Antonio Garrigues, Jaime Fonrodona, Antonipo Enrich Valls, Bernardino Herrero, Fernando Asúa, José Vicente Izquierdo, José María Aguirre Gonzalo, Miguel Allúe Escudero, José Marío Armero Javier Arrien, Gabriel Barceló, Claudio Boada, Mario Caprile, Jaime Carvajal, Carlos Desclaux, Pedro Duran Farell, Jaime Echevarría, Fernando de Elzalburu, Alejandro Fernández de Araoz, Enrique Fuentes Quintana, Enrique García Ramal, Nicolás Lasarte, José María López de Letona, Juan Lladó, Manuel Márquez Balín, Juan Miró Chavarría, Carlos Pérez de Bricio, Rafael del Pino, Felipe Ronda, Manuel Soto, Rafael Termes Pedro Toledo e Ignacio Zumárraga.

La APD fue fundada en 1956 a imagen de la American Management Assotiation. Su primer consejo estuvo formado por Enrique García Ramal (presidente) Ricardo Navarro Rubio (vicepresidente), Gabriel Barceló (secretario) y Rafael de la Rica, José María Aguirre Gonzalo, Roberto Cuñat, Francisco Torras Sarra tacó, Epifanio Ridruejo y Jorge Riviere.

Cambios en el Círculo de Empresarios

También el Círculo de Empresarios tiene prevista una renovación en su junta directiva y previsiblemente en su presidencia, en el primer trimestre de 1982. La vigencia de su junta directiva es de cuatro años, renovándose al 50% cada dos años. Las anteriores elecciones tuvieron lugar en marzo de 1978 y de 1980, por lo que es casi seguro que las próximas sean en el mes de marzo de 1982. En las últimas elecciones celebradas por este club privado de empresarios, resultaron miembros de la junta directiva Santiago Foncillas, Claudio Boada, Rafael del Pino, Arturo Gil, José Luis Cerón, Manuel Azpilicueta, Manuel Márquez Balín, Isasi Isasmendi, José Felipe Beltrán y Alfredo Giménez Cansina, que, por tanto, no tienen que pasar ahora por el trámite de una nueva votación. Sí cumplen su mandato, y por tanto tendrán que presentarse a reelección o abandonar la junta directiva, personas como López de Letona, Miró Chavarría, Juan Entrecanales, Antoñanzas, Mario Caprile y otros.

Al presidente lo elige la junta directiva del Círculo de Empresarios, por lo que Santiago Foncillas podría volver a ser elegido. Sin embargo, todos los indicios hacen predecir que Foncillas no se presentará a la reelección. Fuentes solventes indican que las personas que podrían aspirar a dicho puesto son Rafael del Pino (presidente de Ferrovial y cuñado del presidente de Gobierno, Calvo Sotelo) o López de Letona (presidente del Banco de Madrid, entre otros cargos), aunque parece tener mayores posibilidades el primero. Mario Caprile seguirá previsiblemente de vicepresidente, cargo del que, sin embargo, cesará Claudio Boada, sobre todo si accede a la presidencia de APD.

Alegre Marcet, al IEE

Otra institución que cambiará su presidente el primero de enero es el Instituto de Estudios Económicos (IEE). Cesará Rafael Acosta, director general del Banco de Bilbao, y cubrirá su vacante Juan Alegre Marcet, presidente de Fuerzas Eléctricas de Cataluña y de la patronal eléctrica UNESA (Unidad Eléctrica).

El primer presidente del IEE fue Carlos March, presidente de la Banca March, que en una junta directiva del Instituto decidió que a partir de ese momento la presidencia de la entidad sería rotatoria por un año por orden alfabético, para evitar cualquier personalismo inútil.

Así accedió Rafael Acosta y así le sucederá Alegre Marcet, y en 1983, Isidoro Alvarez (consejero delegado de El Corte Inglés). La junta directiva del IEE se compone de unos cuarenta miembros.