Neonazis alemanes perecieron en un tiroteo con la policía

Dos muertos, dos heridos graves y otro leve es el balance de un tiroteo registrado la noche del pasado martes en un barrio de Munich entre la policía de Baviera y los ocupantes de un coche, cinco neonazis, cuatro alemanes y un francés. Dos de los extremistas murieron, otro resultó gravemente herido y dos policías sufrieron heridas, uno de ellos en un pulmón, en la refriega.Los neonazis pertenecen a un grupo llamado Movimiento Socialista Popular de Alemania, fundado en 1971 por Friedhelm Busse con el nombre de Partido del Trabajo. Busse, de 52 años, es un antiguo afiliado al Partido Nacionaldemocrático de Alemania (NPD), que a fines de los años sesenta llegó a tener diputados en varios parlamentos regionales.

En este grupo militó durante algún tiempo el joven Franz Schubert, que se suicidó en septiembre de 1980 en la frontera de la República Federal de Alemania con Suiza después de haber dado muerte a un empleado de aduanas y a un policía suizo que intentaron impedir que pasara de contrabando unas armas adquiridas en ese país

El grupo implicado en el tiroteo del martes por la noche en Munich, formado por varios jóvenes entre dieciocho y veinticuatro años, salió de la casa de Busse, donde después la policía encontró un importante contingente de armas. Policías de paisano observaban al grupo, que partió en un automóvil Citroën, conducido por un joven francés. La policía rodeó el coche, pero uno de los ocupantes lanzó una granada y se produjo inmediatamente el tiroteo, que concluyó con dos neonazis muertos y otro gravemente herido, así como dos policías, uno de los cuales quedó con un pulmón atravesado por una bala.

Desde hace algo más de un año, los terroristas de extrema derecha han estado implicados en varios tiroteos y atentados en la RFA con un elevado balance de víctimas. El caso más espectacular entonces fue la bomba en la fiesta de octubre, en Munich, que causó trece muertos.

Los servicios secretos de la RFA llaman la atención en sus informes sobre la internacionalización del extremismo de derecha, con conexiones entre neonazis alemanes y de otros países. Según la central de los servicios secretos federales, con sede en Colonia, "desde hace algunos años la cooperación entre esos grupos es principalmente multilateral" y "hoy está justificado hablar de la existencia de un neonazismo internacional".

Aunque los servicios secretos alemanes federales rechazan la existencia de una Internacional negra, reconocen el incremento de encuentros internacionales de neonazis, donde "se discuten planes para realizar atentados y conseguir armas, munición y material explosivo".

Entre los países implicados en estas conexiones internacionales, mencionadas por los servicios secretos de la RFA, figura también España.

En su informe anual de 1980, la Oficina Federal de Protección de la Constitución (servicios secretos) menciona al grupo español Círculo Español de Amigos de Europa (CEDADE), cuyos integrantes "en 1980, como en años anteriores, estuvieron en estrecho contacto con sus compañeros de ideología alemanes".

El informe menciona como "próximas al CEDADU las Ediciones Bausp, de Barcelona, que "distribuyen en la República Federal de Alemania material de propaganda neofascista y también emblemas nacional socialistas".