El Gobierno vasco quiere abrir un debate sobre los pactos autonómicos
Si en un plazo de quince días el Ejecutivo vasco no recibe respuesta alguna del Gobierno central a las objeciones que por escrito expuso sobre las conclusiones de la cumbre autonómica, el Parlamento vasco será el principal escenario de las quejas del partido mayoritario del Gobierno vasco. El portavoz del Gabinete, Ramón Labayen, anunciaba ayer, en una conferencia de Prensa celebrada en Vitoria, la petición formal que el Gobierno autónomo había presentado al presidente de la Cámara para realizar un debate sobre los llamados pactos autonómicos.
La operación retorno del Gobierno vasco a la actividad política no ha traído aires renovadores en lo que al diálogo Madrid-Vitoria se refiere, a pesar de las vacaciones estivales. La tensión, frialdad y dureza existentes entre las dos Administraciones el pasado mes de junio subyacen acaso con mayor gravedad al reanudar el curso con los pactos autonómicos como telón de fondo.
Precisamente el acuerdo adoptado entre UCD y el PSOE en materia autonómica fue un tema que tuvo un tratamiento estelar en la primera sesión posvacacional del Ejecutivo vasco, en cuya opinión dichos pactos contienen interpretaciones restrictivas del estatuto y chocan, a veces frontalmente, contra el sistema foral del concierto.
Dos documentos del Gobierno vasco han sido remitidos a Leopoldo Calvo Sotelo en los que se desgranan las objeciones que el Gabinete expone frente a los pactos autonómicos. Si en quince días no obtienen ninguna respuesta de la Administración central podría celebrarse un pleno monográfico del Parlamento vasco para tratar el mencionado tema, ya que el ejecutivo del Gobierno ha formulado la petición oficial al presidente de la Cámara.
Por otra parte, el Gobierno vasco expresó ayer su rechazo a la propuesta, que forma parte de los pactos autonómicos, de distribución del fondo de compensación interterritorial, que considera «injusta y gravemente perjudicial para el País Vasco».
El Ejecutivo autonómico señala a este respecto que la propuesta de distribución elaborada en la última reunión del Consejo de política fiscal y financiera rebaja considerablemente la suma que Euskadi habrá de recibir del Estado, según una interpretación literal de la ley orgánica para Financiación de las Comunidades Autónomas.
La polémica del himno
En otro orden de cosas, el Gabinete del lendakari Carlos Garaicoetxea ha decidido presentar al Parlamento -en el curso de esta misma semana- el proyecto de ley sobre el himno de la comunidad autónoma, que, en su opinión, debería ser el canto compuesto por Sabino Arana en 1903, utilizado por el Gobierno vasco en su breve mandato durante la República, conocido, por el nombre Eusko Abendaren Erezerkia o gora ta gora.
Precisamente la utilización de ese solemne canto durante la estancia del ex presidente del Gobierno Adolfo Suárez en el País Vasco provocó una controvertida polémica entre socialistas y nacionalistas en el curso de una sesión plenaria del Parlamento que tuvo lugar en Vitoria el pasado mes de marzo. Los primeros, en aquella ocasión, manifestaron públicamente su malestar no ya por la utilización de un himno que aún no había sido aprobado reglamentariamente, sino por lo que ellos consideraban un canto partidista del PNV.
