Fidel Castro,

Francisco Fernández Ordoñez, Felipe González y Winston Churchill, si viviera, entre otros muchos afamados fumadores de puros, nunca soñaron que alguna vez se inventara un veguero que les resultara irresistible. Y lo han fabricado. Ha sido en Las Palmas de Gran Canaria, donde unos especialistas en la materia, ayudados con las exquisitas labores canarias, han hecho un puro que mide tres metros y ochenta centímetros de largo, un metro y diez centímetros de circunferencia y pesa 110 kilos. Los autores de la hazaña enviarán su obra a Londres para que los directivos del Guinness Book of Records determine si este es, en efecto, un record.