Primeros movimientos para las elecciones a presidente de la Federación Española

Los primeros movimientos ante las elecciones a presidente de la Federación Española de Automovilismo ya han sido dados. Pese a que, según el calendario previsto, dicha elección no se efectuará hasta el próximo otoño, ya existen varios candidatos a ocupar el puesto del actual presidente, Fernando de Baviera, que sigue sin definirse sobre su continuidad. Pero ninguno de estos candidatos tendrá nada que hacer si Baviera decide seguir en el cargo.

El más madrugador en su empeño ha sido Sandro Rocci. La trayectoria del ingeniero diseñador del circuito del Jarama siempre ha estado conformada por puestos federativos, nunca como practicante directo del deporte del automovilismo.Desde sus puestos federativos, Sandro Rocci ha estado junto al actual presidente de la Federación Española de Automovilismo, después se puso en contra, para más tarde, pedirle su readmisión en la Federación y volver a formar parte de su equipo.

Su candidatura, manejada desde la sombra por Jesús Saiz -creador de todo el complejo deportivo del Real Automóvil Club de España, en el que está incluido el circuito del Jarama-, significa, por la tradición, el continuismo. Un continuismo que va mucho más allá del propio Baviera, que, de alguna manera, vino a romper con ciertas formas del pasado.

La política actual de Rocci, cuando aún faltan tres meses para que la elección se lleve a cabo, es jugar con la posibilidad de que Baviera no se presente -que él da como segura- y con el posible apoyo del RACE -que también él da por hecho en sus primeros contactos preelectorales-. Pero ni es segura aún la no candidatura de Baviera -según ha podido confirmar EL PAIS- ni, muchísimo menos, lo es el apoyo del RACE, que, por ahora, no quiere manifestarse en favor de ningún candidato, por mucho que, a sus espaldas, algunos quieran jugar en su favor con dicho apoyo -ségún se ha podido confirmar- también desde el propio RACE a EL PAIS.

Dos candidatos más

Pero las dudas de Fernando de Baviera no sólo han alentado la candidatura de Sandro Rocci. Dos candidatos más, uno en Cataluña y otro en Madrid, parecen aspirar, y con fuertes apoyos cada uno de ellos, a la presidencia de la Federación Española de Automovilismo. Aunque en ambos casos, quizá con más conocimiento de causa que en el de Rocci, los candidatos quieren esperar la decisión de Fernando de Baviera antes de jugar la baza electoral.Tanto el candidato catalán como el madrileño, hombres muy vinculados al automovilismo desde su práctica brillante, y con fuertes conexiones dentro y fuera del deporte, son conscientes de que Baviera ganará con facilidad si decide presentarse a la reelección. El actual presidente, que duda aún sobre la decisión final porque está cansado, no ha encontrado las cosas como él esperaba, y además aspira a un importante cargo en la Federación Internacional, tiene a su favor el poderoso aparato del poder, el haber realizado un trabajo meritorio, la mejora en las relaciones internacionales, el incremento del presupuesto, su popularidad y, sus contactos. El que su ambicioso plan inicial no haya llegado a cumplirse nunca y el no haber podido limpiar y reestructurar como debería -y en su día prometió hacer-, el complicado entramado deportivo del automovilismo en este país, el dedicarse más a las cuestiones internacionales -que a las nacionales y no haber sido capaz de relanzar el deporte desde la base y la altura, males que se le achacan al actual presidente, nunca serán suficientes como para que éste, caso de presentarse, no gane las elecciones de forma arrolladora.

La postura de Baviera de no querer sembrar la discordia en el deporte y retirarse si existe un candidato no servirá de nada. Al menos hay tres, entre los que la lucha podría estar centrada en los dos que todavía están en la sombra.