Encarcelado, por complicidad masónica, un alto militar italiano
Ayer fue a la cárcel el contralmirante Vittorio Forgione, implicado en la logia masónica Propaganda 2 (P-2), que ha sido acusado de espionaje militar.La noticia ha causado sorpresa y preocupación, porque Forgione es el director del Centro de Aplicación Militar de la Energía Nuclear (CAMEN). Los carabinieri, al requisar su casa, encontraron toda una serie de documentos con el membrete de la OTAN y con la anotación top secret.
El hecho de que personajes como Forgione, en cuyas manos estaban secretos militares de envergadura, pertenezcan a la logia de Licio Gelli demuestra, según los observadores, que en la cumbre de esta organización seudomasónica se tramaban operaciones desestabilizadoras de la democracia.
El contralmirante Forgione figuraba en la lista de Gelli con el número 953. Al comenzar ayer en la cárcel de Génova los interrogatorios volvió a repetirse una escena ritual el militar se sintió indispuesto y tuvo que ser trasladado al hospital carcelario.
Por su parte, la Magistratura de Roma ha dado orden de que se prive de pasaporte a veintidós de los personajes con mayores implicaciones en la P-2. Esta decisión, después de cuarenta días del escándalo, ha sido muy criticada, ya que, como se podía suponer, la mayor parte de esta gente ha puesto ya pies en polvorosa, y cuando los carabinieri han empezado a presentarse en sus casas la respuesta es unánime: "Ausente".
Según el diputado socialista Falco Accame, responsable de la política militar de su partido, es muy grave que toda una serie de militares que trabajaban con el contralmirante Forgione, que ha acabado en la cárcel, estuvieran inscritos en la P-2.
Por lo que se refiere a las consecuencias disciplinarias contra los afiliados a la logia, existe bastante resistencia para expulsar de sus cargos a ciertos personajes en los ministerios, organismos públicos y en el Ejército.
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