Toreros sueltos
Está visto que EL PAIS sigue una línea firme a favor de la fiesta nacional. Está visto que los que estamos en contra de cualquier orgía de sangre, premeditada y absurda, al final tendremos que acatar la voluntad de esa minoría de castizos (que se creen), a esa minoría del café, copa, puro y toros. ¿Cómo es posible que EL PAIS, un periódico democrático (que debería respetar gustos mayoritarios), nos ofrezca diariamente, por activa, pasiva y perifrástica, toda esa cantidad de desobjetivizada información?
Aunque hay que reconocer que resulta sarcástico preocuparse por unos asesinatos controlados teniendo todavía colgando sobre nuestras cabezas la espada de Damocles, y es que todavía queda mucho torero suelto (y no con traje de luces precisamente). /
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