Siete policías y dos mujeres, heridos en los incidentes, ocurridos al final de una manifestación en Leganes

Un subcomisario, un policía nacional, cuatro funcionarios del Cuerpo Superior de Policía, un policía municipal y dos mujeres resultaron heridos el domingo en el final del transcurso de una manifestación autorizada en Leganés para reivindicar una mejor asistencia sanitaria y expresar la satisfacción por la consecución de un hospital para esta población. Miembros de la Corporación municipal de Leganés presentes en el momento del incidente señalaron a este periódico que el suceso fue debido a una actuación inoportuna e imprudente por parte de los miembros de la policía. En la manifestación, convocada por el Ayuntamiento, participaron unas 8.000 personas.

El suceso ocurrió poco después de mediodía, cuando finalizaba la citada manifestación, momento en el que un grupo de cuatro o cinco jóvenes portaban, recogida, una bandera republicana. Inspectores del Cuerpo Superior de Policía, tras identificarse, conminaron a estas personas a guardar la bandera, según el Gobierno Civil, para evitar incidentes y la politización del acto.Los jóvenes, que ya llevaban la bandera recogida, estandarte que había estado colgado en un balcón de la plaza del Campeador, donde acabó la manifestación, tras cruzar algunas palabras con los funcionarios dieron un golpe a uno de ellos con el palo de ésta. En ese momento, el subcomisario y los funcionarios sacaron sus armas en actitud intimidatoria y realizaron varios disparos disuasorios, lo que creó una gran confusión y revuelo entre los allí presentes.

Los jóvenes comenzaron a gritar «Hay terroristas, hay pistoleros», creando gran confusión y algunas carreras en busca de los funcionarios, momento en el que resultó herida en sedal por un disparo de bala una de las mujeres antes citadas. Otras personas resultaron heridas por los golpes recibidos en el momento de las carreras y de pequeños revuelos.

La manifestación había sido convocada por el Ayuntamiento je Leganés y por las asociaciones de vecinos para reivindicar una mejor asistencia sanitaria en la población y expresar su satisfacción por la consecución de un hospital para la zona. Los 8.000 manifestantes salieron de diversos puntos de la lo calidad hasta llegar a reunirse en la plaza del Campeador. Allí estaban presentes los miembros de la Corporación municipal y los parlamentarios Miguel Núñez y Joaquín Almunia, del PCE y PSOE, respectivamente.

El informe que el jefe superior de Policía pasó al Gobierno Civil señala que los portadores de la bandera llamaron fascistas y asesinos a los funcionarios de policía, agrediéndoles violentamente, momento en el que se iniciaron los incidentes, que no duraron más de cinco minutos. Al parecer, estas personas propinaron golpes y puñetazos a los funcionarios y a varios policías nacionales que se encontraban en el lugar de los hechos.

Protesta del Ayuntamiento

A última hora de la tarde del domingo, los miembros de la Corporación municipal hicieron pública una nota en la que manifestaban su más enérgica protesta por los incidentes ocurridos y condenaban la provocación de que habían sido objeto los manifestantes. La misma nota matiza que «la actuación policial fue inoportuna» y creó un grave desconcierto y confusión entre las personas allí reunidas.El alcalde de Leganés, Ramón Espinar (PSOE). manifestó a este periódico que la actuación policial podía haber sido más discreta y más oportuna ya que la manifestación acababa de concluir. Por su parte, la Jefatura Superior de Policía señala que los funcionarios fueron replicados violentamente por los manifestantes, viéndose obligados a sacar sus armas en actitud intimidatoria.

La policía continuaba a última hora de ayer las investigaciones para proceder a la identificación y detención de los jóvenes que portaban la bandera republicana y que organizaron -según el Gobierno Civil- los incidentes señalados.

Los heridos no necesitaron ninguna intervención médica -sólo presentaban algunos golpes y contusiones-, excepto una señora que fue atendida en el hospital Primero de Octubre y salió minutos más tarde.

Antecedente en Parla

El antecedente más próximo de violentos incidentes en una manifestación en Madrid es el ocurrido en Parla el 5 de marzo de 1979, cuando Ursino Gallego-Nicasio, de catorce años, murió a causa de una hemorragia interna producida por el impacto de una bola de goma disparada por la policía antidisturbios, en el curso de una manifestación de protesta por la escasez enorme de agua que sufría el pueblo.Era el segundo domingo consecutivo que los habitantes de dicha localidad se manifestaban sin permiso, ya que la autorización no se concedía en época electoral, para protestar por los constantes cortes de agua que sufría Parla.

Los enfrentamientos cobraron caracteres de gran violencia y comenzaron a formarse barricadas en las calles. En el curso de esos incidentes fue cuando, según testigos presenciales, el joven presentaba un gran hematoma en el pecho, tras recibir el impacto de una bola de goma.

La respuesta no se hizo esperar y los vecinos del pueblo se volvieron a manifestar en protesta por la muerte del joven Gallego-Nicasio.

Una comigión investigadora fue crea da para llegar al fondo de lo sucedido y esclarecer los hechos. Hoy, después de Llos años, no se tiene conocimiente, de que el tema haya vuelto a ser revisado y si de los hechos se derivó algún tipo de responsabilidades.

También el 8 de septiembre de 1977 fueron heridas y detenidas varias personas en el curso de una manifestación, también en Parla, por las malas condiciones del transporte. En este, caso también las Fuerzas de Orden Público tuvieron que reclamar refuerzos a la policía antidisturbios de Madrid.