Albania rechaza las acusaciones yugoslavas sobre provocaciones en Kossovo
El embajador albanés en Belgrado ha rechazado «por calumniosa y tendente a desprestigiar a Albania», la nota de protesta en la que la cancillería yugoslava acusaba el jueves a Tirana de estar «apoyando a los elementos hostiles y antiyugoslavos que en Kosovo embisten desde posiciones irredentistas contra el orden constitucional de la federación yugoslava». Mientras tanto, la situación es calificada oficialmente de. complicada en Kosovo, región autónoma yugoslava habitada por un 80% de«albaneses, donde ayer se efectuó el entierro de los cuatro policías muertos a tiros por dos albaneses, padre e hijo según ciertas versiones, que se refugiaron en una casa donde había vanas mujeres y niños.El comunicado oficial del Ministerio yugoslavo del Interior acusó a Taxir Mexaja y Nebixa Mexaja, que resultaron muertos en el asedio, de haber utilizado como rehenes a las mujeres y los niños. Ambos son calificados de criminales, sin que quede suficientemente claro si se trata de terrorismo nacionalista o de delito común.
Llegan a Belgrado noticias de que por los pueblos de Kosovo siguen produciéndose brotes de nacionalismo más o menos pasivos, a pesar de la presencia de fuertes contingentes del Ejército y la policía federales. Más jóvenes que de costumbre han sustituido los atuendos modernos europeos por el ancestral traje albanés y portan en sus capas el águila bicéfala, símbolo albanés no prohibido en Kosovo pero que ahora prolifera. La ciudad universitaria de Pristina sigue siendo el foco principal de las tensiones nacionalistas y separatistas proalbanesas de Envver Hoxha, según la Prensa yugoslava, mientras que se preparan medidas contra el rector y varios profesores acusados de alentar el nacionalismo. Poco se sabe de lo que ocurre en las aldeas del interior, algunas limítrofes con Albania.. Tirana ha interrumpido por el momento su polémica de Prensa sobre los acontecimientos de Kosovo con Belgrado, y son los yugoslavos los que han pasado a atacar con frecuencia al «estalinismo irredentista de Albania». Pero Radio Tirana, escuchada también entre las minorías albanesas de Yugoslavia, emite sugerentes programas sobre «la violencia británica contra la región autónoma del Ulster», destinados a suscitar reacciones nacionalistas en Kosovo.
Mientras tanto, los ocho representantes de las seis repúblicas yugoslavas federadas (Serbia, Croacia, Eslovenia, Montenegro, Bosnia-Hercegovina y Macedonia) y de, las dos regiones autónomas (Voivodina y Kosovo) han investido hoy al representante de Eslovenia, Sergej Krajger, al frente nominal de la federación durante un año, concluidos los doce meses del mandato de Cvijetin Mijatovic. Se trata del relevo normal anual. El año que viene le correspondrá el turno al representante de la república de Serbia, Petar Stambolic. Las decisiones se adoptan en el seno del octeto presidencial, al que se suma el presidente de la Liga de los Comunistas, por mayoría de cinco votos, y, cuando se trata de una resolución trascendental, se recurre a la mayoría de dos tercios, seis votos.
