No hubo contactos fronterizos con los secuestradores de Quini
La familia de Quini ha desmentido que el hermano de éste, conocido como Castro, hubiera viajado hasta la frontera con Francia para entregar el dinero del rescate. Los contactos con los secuestradores han sido sólo telefónicos y siempre en Barcelona.La situación, por tanto, se mantiene sin mayor novedad que la de la aparición ayer de varios perros muertos que tenía Quini en una finca que posee en Avilés. El hecho, de momento, no guarda relación con el secuestro, por cuanto es normal que los perros de caza -Quini es un gran aficionado a cazar- mueran inesperadamente si han ingerido huevos envenenados, hecho que ocurre con cierta frecuencia. Estos suelen ser depositados en el campo por los agricultores para combatir a los animales que causan daños en los cultivos, generalmente rapaces.
