Cedieron los nervios

Los nervios cedieron de forma apreciable en las sesiones de ayer, y con ellos la presión casi indiscriminada a la que los vendedores sometían a la mayor parte de los valores que se contrataban.La tendencia de los mercados continuó siendo bajista, pero ya de una forma más reposada. Incluso, una vez finalizadas las operaciones, comenzaron a generarse tanteos compradores.

No obstante la condición de viernes que presenta la sesión de hoy, y, por tanto, último día hábil de la semana, aporta un cierto matiz de incertidumbre al comportamiento que puedan experimentar las Bolsas.

El punto de mayor interés de la reunión lo constituyó la escasa oferta de letras de cambio que existía, frente a una demanda que algunos cifraban en más de mil millones de pesetas. Los exiguos 133 efectos comerciales a la venta resultan la cifra vendedora más baja desde hace mucho tiempo. Los rumores sobre una posible «recomendación» para que no se negocien letras en las Bolsas de nominales inferiores al millón de pesetas, y cuya puesta en funcionamiento parece inminente, podría ser una de las razones de este comportamiento contractivo de la oferta. Por otro lado, las intenciones más que evidentes de los emisores-vendedores de encarecer su mercancía también han jugado un papel destacado y, en concreto, ayer se realizaron todas las operaciones por debajo del 13%.