Los trabajadores del Metro volverán mañana a la huelga

Los trabajadores del Metro acordaron ayer mantener la convocatoria de huelga, solicitada para mañana jueves, al no haberse llegado a un acuerdo satisfactorio en el curso de las negociaciones que se mantienen. Aunque el Ministerio de Transportes aplicará de nuevo el decreto de servicios mínimos, la regularidad del servicio dependerá, en esta ocasión, de la incidencia que puede tener la huelga de celo que hoy podría comenzar.Las negociaciones entre trabajadores y dirección se reanudaron el pasado lunes, después de casi dos semanas de suspensión. La reunión sirvió para que los miembros del comité de empresa explicaran que el aumento solicitado por los trabajadores se ha bajado al 15,1 % y para que la dirección subiera del 10% al 11%.

A pesar de este acercamiento, los trabajadores decidieron ayer realizar la huelga, ya que, sólo el aumento de un 1 % sobre la oferta inicial no se considera una mejora suficiente para desconvocar el paro.

Otros dos puntos, que se trataron en el curso de las negociaciones, fueron la repartición, en los doce meses del año, de la cuantía de la Seguridad Social que corresponde a la paga de vacaciones y la petición de que los trabajadores puedan cobrar su sueldo durante las horas del trabajo.

El primer punto quedó, al parecer, sujeto a la desconvocatoria de la huelga de mañana, en tanto el segundo fue rechazado por la dirección, por considerar que estos permisos representarían unas importantes pérdidas para la compañía.

Miembros del comité de empresa manifestaron a EL PAÍS que hoy mismo podrían empezar a notarse los efectos de lo que se ha denominado campaña de seguridad, y que consiste en la aplicación estricta del reglamento, más conocida por huelga de celo.

En caso de que esta aplicación estricta fuera realizada efectivamente por una parte de los trabajadores, la regularidad del servicio se vería afectada, especialmente, en un día como mañana, en que el Metro sólo funcionará durante ocho horas.

Los efectos de la huelga se verían así aumentados, a diferencia de lo que ocurrió el pasado día 13, en que, prácticamente, sólo se vieron afectadas algunas carreteras de entrada, tales como las de Burgos, Barcelona y Extremadura.

Este deseo de endurecer la situación no es apoyado por la totalidad de los trabajadores. Un sector de los mismos se mostró ayer partidario de que se diera un margen c confianza, desconvocando la huelga del día 19 e incluso la del 2 con el fin de tener tiempo para negociar. La propuesta fue derrotada, por lo que la huelga prevista para mañana se realizará, a no ser que antes de las seis de la mañana, lasituación haya variado sensiblemente, aunque no parece probable que así ocurra.

Las negociaciones serán reanudadas, por otra parte, el próximo sábado, día en que el inspector de Trabajo que hace de mediador convocado a ambas partes para ver si se llega a un acuerdo que ponga fin al conflicto.