Los médicos de la Beneficencia amenazan con llevar al Ayuntamiento a Magistratura

Los funcionarios municipales dependientes del servicio de Beneficencia del Ayuntamiento han anunciado que están dispuestos a llegar hasta la Magistratura de Trabajo si la Corporación intenta aplicar el primer convenio colectivo en lo que se refiere a los nuevos horarios laborales. El convenio ha sido suscrito por la Corporación y los delegados sindicales, a excepción de UCD y de los delegados de la coalición de independientes.

Según el convenio, los funcionarios de la Beneficencia Municipal (cuatrocientos médicos, trescientos ATS y cien auxiliares sanitarios) pasarían a trabajar en turnos de seis horas dianas de mañana, tarde y noche; mientras que hasta el momento realizan su trabajo en turnos de veinticuatro horas una vez por semana.Aurelio Pérez Cabezas, delegado de la coalición de independientes y asistente técnico sanitario de la Beneficencia, explica que la negativa a aceptar este nuevo horario de trabajo se debe a que éste lesiona los derechos adquiridos, la eficacia y la economía de todos estos funcionarios. «Nosotros consideramos que es encomiable el afán del Ayuntamiento en racionalizar y mejorar el régimen de trabajo, pero no se puede utilizar el mismo sistema para un jardinero que para un médico o un bombero».

En un comunicado redactado por este colectivo de trabajadores, se califica la situación de gravísima, y se asegura que llevan treinta años prestando este trabajo en régimen ininterrumpido de veinticuatro horas.

El señor Pérez Cabezas informa que a lo largo de todas las negociaciones los médicos han manifestado su disconformidad, y que aunque el convenio ya esté terminado, si durante el próximo pleno es aprobado por la Corporación, presentarán un recurso en el registro municipal y que, si no se atienden sus peticiones, llevarán el caso a la Magistratura de Trabajo. Para ello ya han presentado el tema en el despacho laboralista de Francisca Sauquillo, a fin de que inicie las gestiones pertinentes.

El señor Pérez Cabezas concluye diciendo que los aumentos salariales previstos en el convenio no constituyen un aliciente suficiente, por cuanto, de aceptar el horario, todos ellos tendrían que abandonar otras ocupaciones que desempeñan fuera de la Beneficencia Municipal.