El Vizcaya creará una unidad internacional para competir con la banca extranjera instalada en España

El Banco de Vizcaya abrirá en los próximos días en Madrid una unidad internacional, separada funcionalmente de la casa matriz, que tendrá como objetivo actuar dentro de España como si se tratara de una sucursal de un banco extranjero de reciente instalación en nuestro país. La nueva unidad del Vizcaya tendrá una estructura de sucursal y actuará en todos aquellos campos, y actividades que ahora tienen o que en el futuro tendrán los bancos extranjeros que funcionan en España. En este sentido será el primer banco español que, a nivel operativo, posee una unidad internacional de este tipo.La próxima apertura de esta sucursal internacional del Banco de Vizcaya fue anunciada por el consejero delegado del banco vasco, Pedro de Toledo, durante la reunión informativa previa a la celebración de la junta general de accionistas, que tuvo lugar el pasado sábado en Bilbao. Fuentes del Vizcaya han señalado a este respecto que la creación de la sucursal es inminente y que el director de la misma será Gonzalo Terreros, hasta ahora director del Banco de Vizcaya en París.

El primer objetivo de esta sucursal será presentar, tanto a los clientes nacionales como extranjeros, una oferta de productos de banca internacional con la misma flexibilidad y eficacia que una sucursal de banco extranjero. «Para competir con los bancos extranjeros con una mayor flexibilidad y agilidad quizá haya que recurrir a una unidad del mismo corte que ellos tienen», declaró a este periódico Raimundo Blanco, director para América de la división de banca internacional del Vizcaya.

Objetivos de la sucursal

Con un coste adicional nulo, al tratarse de una reconversión de una de sus sucursales interiores, la nueva unidad tratará también de potenciar el circuito internacional del propio banco, según explicó el consejero delegado del Vizcaya. El banco, a este respecto, posee una amplia red de sucursales en el extranjero que, junto a la actividad internacional dentro de España, ha contribuido a los beneficios de la entidad en un 25,2% del total, frente al 22,7% del pasado año.Los beneficios de la actividad internacional del Vizcaya representaron el pasado año más de 1.500 millones de pesetas, de un total del banco superior a los 6.000 millones de pesetas.

Según fuentes del citado banco, la nueva sucursal podrá acudir al interbancario independientemente de la actividad normal del Vizcaya en el mismo, con el fin de obtener financiación para sus créditos sindicados en pesetas. La sindicación en pesetas, una de las principales actividades de los bancos extranjeros instalados en España, sería en este aspecto la actividad más resaltable de la nueva unidad internacional.

Asimismo la sucursal estará encargada de prestar la asistencia necesaria, tanto a clientes y residentes dentro y fuera de España, para obtener créditos y sindicaciones endivisas. En este sentido, Pedro de Toledo manifestó que el Vizcaya ha sido el banco español que mayor participación ha tenido en créditos en divisas durante 1980, habiendo dirigido créditos por importe superior a los 1.000 millones de dólares.

Según fuentes del Vizcaya, la nueva unidad contará con una plantilla reducida, tal como ocurre con las sucursales de los bancos extranjeros en Madrid, con el fin de desempeñar una gestión individualizada. En este sentido, el coste adicional de creación de esta sucursal será nulo, al centralizar en ella las actividades que previamente se realizaban en otras áreas del banco. Un ejemplo de esta centralización es la responsabilidad del mercado de letras secundario dentro de la unidad.

La creación de este nuevo tipo de actividad dentro de un banco español se considera en medios bancarios como un claro intento de competir con la banca extranjera instalada en España, cuyos beneficios han sido elevados durante sus primeros meses de actividad pese a las plantillas y estructura de costes tan simple con las que actúan.