Suspendida la importación de automóviles por Ceuta
La importación de vehículos usados, en su mayor parte Mercedes de procedencia alemana, ha sido suspendida según órdenes llegadas a la delegación regional de Comercio de Ceuta, e incluso uno de los importadores ha sido detenido. Este negocio venía realizándose desde hace ya algunos años, pero adquirió un gran auge durante la estancia al frente de la delegación de José Ramón Ferrándiz, ex militante del Partido Comunista de España, quien fue cesado hace pocos meses por razones desconocidas, aunque se apuntan, entre otras circunstancias, su relación con la importación de coches Mercedes.Todo vehículo que era vendido en Ceuta llevaba su correspondiente permiso de importación y en algunas ocasiones se realizaba el pago a través de oficinas bancarias. Su precio dependía de los años del coche, pero no sobrepasaba las 800.000 pesetas, mientras que uno nuelvo, en el distribuidor oficial, alcanzaba 1.700.000 pesetas, loque provocó que éste presentará su disconformidad ante - lo que consideraba una competencia. Un súbdito austríaco llegó a traer hasta esta ciudad catorce Mercedes, lo que constituyó un auténtico récord entre las varias personas que se dedicaban a la importación de los mismos. Este individuo tenía un socio en Ceuta que era quien le buscaba los posibles compradores.
La prohibición se ha producido a los pocos días de tomar posesión del cargo el sustituto de José Ramón Ferrándiz, Antonio Estévez, quien cuando todavía no se sabía nada de la suspensión de la importación, declaró que quería llegar hasta el fondo del asunto.
La detención de uno de los importadores, Fernando Jiménez, se produjo al descubrirse que en un almacén de Ceuta se ofertaban varios vehículos de marca Mercedes con placa turística de Alemania. Al parecer, Fernando Jiménez infringió la ley de régimen temporal de importación de vehículos, asi como la ley de control de cambio, ya que los trece vehículos Mercedes sobrepasan los seis millones de pesetas, que es la cantidad máxima que se exige para no incurrir en delito.
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